El entierro de un joven asesinado terminó con 38 detenidos

El pasado domingo a las 10:30, Richard Pintos (25) fue baleado por dos delincuentes cuando volvía a su casa de barrio 8 de abril de la capital de Santiago del Estero. El joven murió 24 horas después y fue enterrado en medio de un enfrentamientoque terminó con 38 detenidos.

Todo comenzó el domingo en la esquina de la calle Monteagudo y Únzaga, cuando Pintos se cruzó con una moto en la que iban dos personas que serían vecinos del barrio. El joven se habría puesto a discutir con uno de ellos, lo que hizo que se enfureciera y le disparara en el abdomen. El agresor se fugó.

El joven fue trasladado al hospital regional Dr. Ramón Castillo a donde agonizó durante 24 horas y murió este lunes.

El martes a las 14, la familia trasladó el cuerpo del joven al cementerio La Piedad a donde fue acompañado por una gran caravana. Al llegar al lugar, se produjo un enfrentamiento a donde hubo tiros, destrozos y 30 detenidos.

Sebastián Robles, fiscal de la causa, explicó que un grupo de personas se enfrentó con otro. "Salieron con armas de fuego e hicieron disparos contra la Policía. Se ha secuestrado una camioneta con cuchillos y armas tumberas. Se demoraro a 38 personas y han quedado aprehendidas dos. Se desconce quién era el grupo de personas con el que se enfrentamos. Para mí hay un problema entre dos facciones que no llegamos a entender".

Por el crimen, la Policía hizo seis allanamientos en busca de dar con el paradero del agresor.

Finalmente, el martes a la tarde, los padres de un joven de 16 años -llamado Jairo- lo entregaron ante el fiscal Sebastián Robles como el culpable del crimen de Pintos.

El joven quedó imputado por "homicidio simple".

Según el propio fiscal, los padres lo entregaron por "seguridad". "A la madre le habían incendiado la casa ese día. Ayer secuestramos ropa y ahora estamos en busca de las armas", dijo.

Informe de Gabriel Verdoia.