Comercio y servicios, los actores más relevantes de la economía cordobesa

El sector comercial y de servicios es clave en la economía Córdoba. El comercio al por mayor y al por menor representa el 39,6% del Producto Bruto Geográfico (PBG) de la provincia, ubicándose como la actividad con mayor participación económica y presencia territorial, según se desprende del estudio de la consultora Politikon para la Cámara de Comercio de Córdoba (CCC).

Además, el sector es el principal generador de empleo privado: explica el 45,92% del empleo registrado en la provincia, concentrando 254.456 puestos.

A su vez, el 58,1% de las empresas en Córdoba están vinculadas al sector. Incluso en un contexto económico desafiante, el comercio continúa creando empleo formal, demostrando su dinamismo y resiliencia.

“El comercio cordobés no es un sector más: es el corazón visible de la economía urbana”, destacó el presidente de la CCC, Sebastián Parra, que agrupa a 75 rubros, con 25 cámaras sectoriales asociadas y representa a unas 33.786 empresas, que emplean a 254.456 trabajadores.

Y agregó que el comercio y los servicios no sólo impulsan la actividad económica: cumplen un rol clave en la vida urbana, en la conexión entre producción y consumo, en la creación de identidad territorial y en la generación de oportunidades de desarrollo humano.

Su extensa red empresarial sostiene la actividad en todas las zonas de la provincia y dinamiza barrios, corredores y polos comerciales.

Córdoba crece, pero más lento que la región

Por un lado, el comercio es el sector más relevante en empleo y actividad; por otro, atraviesa una contracción en la cantidad de empresas y un crecimiento del valor agregado que, si bien positivo, plantea desafíos frente a otras provincias de la región.

De acuerdo al relevamiento realizado, el análisis de la última década (2014-2023/24) muestra que Córdoba está creciendo a un ritmo menor que sus vecinos:

- Crecimiento Económico (VAB): Si bien Córdoba creció un 5,7% (por encima de la media nacional del 4,7%), quedó rezagada frente a sus pares de la Región Centro: Santa Fe creció un 8,5% y Entre Ríos, un 11,8%.

- Cierre de Empresas: éste es el dato más preocupante. Mientras que a nivel nacional la cantidad de empresas cayó un 1,9%, en Córdoba fue mucho más profunda, alcanzando un -5,8%. Córdoba perdió más empresas porcentualmente que Buenos Aires (-0,6%) y CABA (-3,6%).

El estudio de expectativas identifica una coyuntura crítica definida por tres factores que ponen en riesgo la supervivencia de los negocios:

• El diagnóstico: la "triple amenaza" se compone de caída del consumo, aumento de costos e incertidumbre macroeconómica.

• Principales dificultades: al consultar a los empresarios sobre qué es lo que más los afecta, hubo un empate técnico en el primer lugar: carga impositiva y caída del consumo/baja en ventas con 57% y, luego, competencia desleal/informalidad (32%).

En cuanto a las expectativas, hay una cautela evidente entre los empresarios:

• Pronóstico de ventas: las opiniones están divididas. Un 38% cree que mejorarán, pero un 37% cree que se mantendrán iguales, lo que sugiere un estancamiento para gran parte del sector.

• Inversión vs. empleo: hay más intención de invertir en capital (42% tiene planes de inversión) que en capital humano (sólo el 28% planea contratar nuevos empleados).

El pedido de los comerciantes es contundente: el 70% exige reducción de la carga impositiva como la medida más necesaria, muy por encima del acceso al financiamiento (50%).

Es decir, el sector es el motor de Córdoba, pero está perdiendo empresas más rápido que el resto del país y crece más lento que jurisdicciones vecinas, mostrando un gran esfuerzo en la generación de empleo.

“El sector Comercio y Servicios se consolida como el motor central de la economía cordobesa (líder en PBG y empleo), aunque evidencia una pérdida de competitividad relativa y una caída en la cantidad de empresas (-5,8%) superior a la media nacional. A pesar de enfrentar una triple amenaza de caída del consumo, alta presión tributaria e incertidumbre, el sector mantiene su resiliencia estructural”, se desprende del relevamiento.

Los comerciantes consideran que, para reactivar el crecimiento y las inversiones, se necesita estabilidad macroeconómica, reducción de la carga impositiva y financiamiento.