Aborto: ¿Qué implica que sea sometido a un referéndum?

Histórica votación en el Senado

Aborto: ¿Qué implica que sea sometido a un referéndum?

09/08/2018 | 08:42 |

Ante el rechazo del proyecto de legalización del aborto, desde Cambiemos proponen que la iniciativa sea sometida a una consulta popular vinculante implicando el voto del electorado. Los detalles.

Ante el rechazo del proyecto de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE), legisladores del bloque de Cambiemos, con el diputado nacional Daniel Lipovetzky a la cabeza, proponen que la iniciativa sea sometida a una consulta popular vinculante.

A través de este mecanismo se le solicita la opinión a la sociedad sobre una determinada ley o política –en este caso se lo denomina referéndum-, o sobre una cuestión excepcional del Estado –conocido como plebiscito-.

La ley 25.432 señala que para que un proyecto llegue a ser sometido a la consulta popular vinculante “deberá tratarse en una sesión especial y ser aprobada con el voto de la mayoría absoluta de miembros presentes en cada una de las Cámaras”.

En caso de que el llamado a un referéndum sea aprobado en Diputados y en el Senado, el proyecto será sometido al voto del electorado, el cual tendrá carácter obligatorio.

En ese sentido, el mecanismo tendrá validez siempre y cuando participe al menos el 35 por ciento de las personas habilitadas para votar en el padrón electoral nacional.

Si el proyecto obtiene mayoría de votos afirmativos del electorado, automáticamente se convertirá en ley y deberá ser publicada en el Boletín Oficial de la República Argentina dentro de los diez días hábiles posteriores a la proclamación del resultado.

En caso de que el proyecto obtenga la mayoría de votos negativos en la consulta popular, la iniciativa quedará descartada y deberá esperar al menos dos años para volver a ser sometida al voto del electorado.

El antecedente reciente del referéndum de Irlanda

El pasado 25 de mayo, la legalización del aborto fue sometida a un referéndum en la República de Irlanda consiguiendo un contundente triunfo con el 66,4 por ciento de votos afirmativos ante el 33,6 por ciento de votos negativos.

El resultado significó un hito histórico para el país europeo, marcado profundamente por el catolicismo –el 78 por ciento de los ciudadanos se define como católico-, que hace sólo tres años había aprobado el matrimonio igualitario.

La participación ciudadana fue la más alta de los 21 referéndums celebrados en el país, de casi cinco millones de habitantes, desde 1996. En aquella oportunidad, los irlandeses votaron por la legalización del divorcio –en Argentina se aprobó en 1987-. 

El proyecto irlandés contempla el aborto legal en las primeras 12 semanas de gestación sin necesidad de explicar las causas de la decisión. Luego, hasta la semana 24, las mujeres podrán interrumpir su embarazo si su vida o salud se encuentran en riesgo o si el feto no pudiera sobrevivir fuera del cuerpo de la madre.