¿Hay rebote? 3 a 2, sí

¿La economía tocó el piso y empezó un tímido rebote? Después de la incógnita sobre las alianzas y candidaturas presidenciales, que quedarán develadas el 22 de junio, la pregunta sobre la coyuntura económica es la segunda más importante para la Argentina.

Un repaso a los últimos datos económicos deja cierto lugar para la esperanza. 

Por supuesto, todas las cifras siguen siendo tremendamente negativas si se comparan abril o mayo (los últimos meses con estadísticas) con los mismos meses del año anterior. Pero eso es obvio: no es ninguna novedad que la economía entró en coma el último año, especialmente si se compara con marzo de 2018, cuando la recesión aún no había comenzado y que en algunos casos había registrado los niveles más altos de actividad en muchos años. La cuestión es comparar con los meses más inmediatos. Para ver si la economía respira o si sigue en estado catatónico. Veamos.

Industria y construcción

Ayer Indec divulgó el esperado Índice de Producción Industrial Manufacturaro de abril. Obvio: se produjo un 8,8% menos que en abril del año pasado. Pero un 2,3% más que en marzo. En abril la actividad industrial, desestacionalizada, fue 5,1% mayor que en lo que había sido en diciembre (un mes tradicionalmente caliente) último, que es el que tiene el peor número de esta crisis. O sea: rebote 1, caída 0, estancamiento 0.

También ayer el Indec dio el índice de la construcción. De nuevo lo obvio: una bruta caída de 7,5% respecto de abril 2018, cuando las obras públicas todavía volaban y los créditos aún UVA recalentaban los corralones.

Respecto de marzo, la actividad de abril fue casi igual: se redujo 0,3%. Pero acá también diciembre fue lo peor. Y en abril la actividad, desestacionalizada, fue 9,8% mayor a la de diciembre. El árbitro duda, pero tira un fallo conservador: rebote 0, caída 0, estancamiento 1.

Autos, comercio y actividad

Con datos más calientes, la industria automotriz sigue en Siberia, pero no cayó aún más. En mayo las automotrices fabricaron un 35,3% menos que en mayo del año pasado y lo mismo (-0,05%) que en abril. Rebote 0, caída 0, estancamiento 1.

La organización empresaria Came, por su parte, asegura que en mayo las ventas fueron, de nuevo, una lágrima en comparación con mayo del año anterior: -14,4%. Pero que fueron 3,5% mayores a las de abril. Rebote 1, caída 0, estancamiento 0.

La consultora OJF, que construye desde hace años su Índice General de Actividad (IGA) encontró que en abril la actividad en general sólo un 1,5% menor a la de hace un año (venía con caídas del 9% interanual) y 1,2% mayor al de marzo. Rebote 1, caída 0, estancamiento 0.

Te la debo rebotar así

A tener en cuenta: este resultado arbitrario y provisorio en el que gana el rebote 3 a 2 se da en medio de un fuerte ajuste fiscal sin antecedentes en 17 años. Todo sucede, además, en medio del apretón financiero: las tasas de interés en pesos más elevadas desde 2002. Encima, es con ingresos de los hogares apaleados por la devaluación y la llamarada inflacionaria. 

Por si faltara algo: un instable contexto internacional, a merced del conflicto comercial de Estados Unidos con China y otros países. O sea: si es que se confirma un rebote, se tratará de un milagro.

Velas a varios santos

Es sobre ese desierto, además, que en este mes que se inicia sucederán varias cosas importantes: el medio aguinaldo a fin de junio, las primeras recomposiciones salariales por paritarias y los distintos anabólicos preelectorales lanzados por el Gobierno (créditos hipotecarios, créditos Anses, estímulo para compras de autos, etc). De ellos, el más importante parece ser el programa Ahora 12, a juzgar por lo que dicen los fabricantes de bienes durables.