Atenti con Europa: no te duermas, campo argentino

Política esquina economía

Atenti con Europa: no te duermas, campo argentino

01/02/2024 | 14:25

 

Redacción Cadena 3

Adrián Simioni

Audios

Atenti con Europa: no te duermas, campo argentino

Como siempre, estamos tan ensimismados mirándonos el pupo los argentinos que nos cuesta mirar lo que pasa afuera. En estos días, por ejemplo, en Europa.

Allí están los productores agropecuarios realizando protestas masivas desde hace semanas en Francia, en España, en Italia. Reclaman lo de siempre: que les den más subsidios (o que no se los achiquen) y que la Unión Europea no avance en un acuerdo de libre comercio con el Mercosur porque no hay manera de que un productor europeo pueda competir contra los agricultores más eficientes del mundo, que son los nuestros.

Pero, ojo. Ahora se notan cada vez más otras cosas que están exigiendo. Exigen menos regulaciones ambientales, que en la Unión Europea son tremebundas. Exigen menos burocracia y trámites inútiles. Y exigen menos impuestos y costos.

Es como si supieran que los subsidios que los han mantenido con vida hasta ahora o el proteccionismo agrícola europeo no se van a poder mantener para siempre. Saben que se termina. Son insostenibles e injustificables.

Entonces están empezando a reclamar no ya subsidios para compensar su ineficiencia, sino que les permitan ser más eficientes. Algo así como “si no me vas a bancar cada vez más, entonces andá liberándome de normas burocráticas, no me molestes más con prohibiciones ecológicas y dejame crecer, ganar escala, dedicarme a actividades más rentables”.

Y acá es donde el campo argentino debe activar las antenitas de vinil. Porque, si ustedes se fijan, en Argentina la lógica de las regulaciones y la burocracia de todo tipo vienen para arriba en lugar de ir para abajo (como podría empezar a suceder en Europa), mientras que se mantiene esta lógica enferma donde, en lugar de recibir subsidios como el agro europeo, al agro argentino lo exprimen cada vez más para subsidiar al resto de los sectores.

Una muestra es el duro rechazo de las organizaciones ambientalistas a cualquiera de los cambios, muchos de ellos muy tímidos, propuestos por el nuevo gobierno a través del DNU de Milei o de la ley ómnibus a las llamadas leyes de bosques, glaciares o de quema.

Ya está suficientemente mal no reconocerle al agro argentino su enorme contribución ambiental –empezando por la siembra directa que ahorra millones de litros de gasoil y protege la tierra como jamás lo hará Europa-. Y ya es un despropósito copiar y pegar normas impuestas al agro europeo subsidiado para imponérselas al agro subsidiador agro argentino. Pero nada podría superar el absurdo que puede llegar a darse: que a los productores argentinos se los limite cada vez más con burocracia, impuestos y límites pseudoambientales mientras que a los agricultores europeos se los empieza a liberar de esos límites.

Te puede Interesar