Otra entrega de Policiales Ilustrados: "el Chancho" Sosa.

Policiales ilustrados

El Chancho que quiere ser Delfín: la historia del mito narco de Córdoba

07/06/2022 | 09:59 | René Alejandro Sosa no es un personaje más en la fauna del narco cordobés. Hijo de un pistolero abatido por la Policía, desde los márgenes forjó una historia de película. Afronta una nueva acusación.

Redacción Cadena 3

Juan Federico


-Si fueras un animal, ¿cuál te gustaría ser?

-Un delfín.

-¿Por qué?

-Porque me gustan los delfines.

-¿Y qué otro objeto que no fuera un humano le gustaría ser?

-Una moto.

-¿Por qué?

-Porque es peligrosa.

-¿Y algún vegetal?

-Una planta.

-¿Pero qué clase de planta?

-No sé, cualquiera, porque en mi casa hay muchas y a mi esposa también le gustan las plantas.

Ocurrió en los primeros días de marzo último, en la cárcel de la ciudad de Cruz del Eje. René Alejandro Sosa, "el Chancho", se había sentado frente a una psicóloga que comenzó a enumerar las preguntas de un extenso cuestionario que al narco le resultó, al menos, extraño. Él sabía que tenía que dejar la mejor impresión, porque pugnaba por convencer a los peritos oficiales de que ya estaba en condiciones de regresar a la libertad.

Los informes y, sobre todo, unos celulares que estaban adentro de la cárcel de manera ilegal, no le fueron para nada favorables a sus deseos.

"El Chancho", el mito narco de los suburbios del cementerio San Vicente, en el este profundo de una Córdoba desigual, en los últimos nueve años sólo gozó de la libertad durante 469 días.

La vida de este líder narco, cuyo apodo terminó por ser toda una referencia sobre el avance de la venta de drogas en ese sector a partir de la década de 2000 (tras la primera devaluación y la crisis fenomenal), tuvo una infancia de la que no guarda los mejores recuerdos. De su madre tiene casi nulas referencias y su padre, un bandido de renombre, terminó abatido por la Policía en un tiroteo en Río Segundo, cuando él tenía 13 años.

Hoy, a los 40, Sosa ya agregó varios capítulos más a su biografía. La calle fue su universidad, con todo lo que eso significa. A mediados de la primera década de este siglo, su apodo ya comenzaba a sonar con fuerza en una sector donde la postergación urbana y social terminó por ser clave para la instalación de cocinas de cocaína. Un mercado ilegal pero con poco de clandestino: a la vista de cualquiera que lo quisiera ver.

"El Chancho" y "el Gallo" (Jorge Altamira) terminaron por ser las principales referencias de esta proliferación narco. Hasta el que asesinato de Facundo Novillo Cancinos (7), el 26 de marzo de 2007, atravesado por un proyectil FAL al quedar en medio de un "narcorobo" en Colonia Lola terminó por develar lo que muchos no querían que se dijera en voz alta.

Desde entonces, "el Chancho" y "el Gallo" comenzaron a ser noticias policiales y judiciales por operativos en contra de ellos. Un año después, Sosa quedó preso tras una redada antidrogas en Villa Carlos Paz, donde tenía una casa. En 2012, la causa se desmoronó en el juicio. Volvió a la calle.

Pero en 2013, cuando acababa de inaugurar un boliche en Villa Santa Rosa de Río Primero, otra vez terminó con las muñecas esposadas. Un peritaje de voz había determinado que él era uno de los compradores de la cocaína que llegaba a Córdoba camuflada en matafuegos.

Desde aquella caída en 2008, Sosa había entendido que tenía que invertir en negocios legales: tenía otro boliche frente al Parque de Las Heras, tuvo franquicias de casas de empanadas en Villa Allende y comenzó a alternar su vivienda de Maldonado con otra residencia en las afueras de Cosquín. Empresario de la noche, empezó a codearse con lo más alto del ambiente. Incluso, reconocidos artistas paraban en su casa.

En 2015, “el Chancho” fue condenado a ocho años de cárcel a raíz de aquellos 18 kilos de pasta base que eran transportados en matafuegos. Estuvo preso hasta fines de 2017, cuando volvió a salir en libertad, beneficiado por el régimen de salidas transitorias. Logró ese beneficio por haber pasado las dos terceras partes de la condena y por haber empezado estudios.

Pero 469 días después volvió a ser detenido, esta vez acusado de haber encargado un crimen en su propio barrio, como represalia por un robo. En el juicio, celebrado en marzo de 2021, la imputación en su contra se desmoronó y terminó condenado a tres años de prisión por violación de domicilio agravada por el uso de arma y agresiones, tal como lo solicitó su abogado Miguel Juárez Villanueva.

El call center tumbero

Cuando Sosa pensaba que quedaba a las puertas de volver a la libertad, el fiscal provincial Enrique Gavier comenzó a deshilar una madeja que hace tiempo deja en evidencia las cadenas entre el delito y las complicidades oficiales: el 13 de mayo de 2021, un guardiacárcel de Bouwer fue detenido cuando intentaba ingresar con dos teléfonos celulares escondidos en los borceguíes.

El fiscal sostiene que el destinatario de esos celulares era "el Chancho", quien habría continuado delinquiendo pese a este preso.

"Queda claro que Sosa utiliza a los empleados del Servicio Penitenciario para que lo provean de aparatos celulares y que logró introducir en la asociación ilícita al guardia Mauro Casado, quien dada su condición de guardiacárcel tenía conocimiento de las actividades ilícitas llevadas adelante por los detenidos desde el interior del establecimiento", se sostiene en el expediente judicial.

Al otro día, 14 de mayo de 2021, "el Chancho" fue trasladado a la cárcel de Cruz del Eje. Pero no todo terminó allí.

Meses antes, en enero de 2021, su concubina y madre de sus hijos, su suegro y otras cinco personas fueron detenidas acusadas de vender drogas en barrio Maldonado. En ese momento, varias miradas enfocaron hacia adentro de la cárcel.

Mientras su pareja aún estaba detenida, Sosa comenzó a recibir la visita de otra mujer. Muy pocos sabían que con ella tenía hijos mellizos, desde hace más de una década.

Uno de los celulares que se le incautó a Sosa adentro de la cárcel tenía un contacto agendado como "Dupla", con llamativas conversaciones: cuánto salía un celular adentro de la cárcel (se ingresan por cerca de 100 mil pesos y se revenden por el doble), para qué se usan, además de directivas relacionadas con el comercio clandestino de drogas, según se presume.

Descifrar quién estaba detrás de ese apodo llevó ahora a Alejandra del Valle Vázquez (49), la "otra" pareja de Sosa, según se sospecha. El jueves último, en su domicilio ubicado en barrio General Urquiza los policías hallaron ayer los seis kilos de cocaína. La droga estaba dividida en seis panes envueltos en un papel amarillo con el logo de Ferrari. Una marca que apunta a un proveedor exclusivo, según reveló Cadena 3.

/Inicio Código Embebido/

/Fin Código Embebido/

En el lugar fueron detenidos la mujer y un hijo de ella, Gastón Vázquez (27). Pero no fueron los únicos procedimientos. También hubo operativos en barrio Maldonado y en otros sectores de la ciudad. Faltaba un quinto sospechoso, Elio Juncos, quien es hermanastro de Sosa, hijo de la exlegisladora del PJ e histórica puntera del oficialismo cordobés, Liliana Juncos, y que ya ha sido nombrado hace años en distintas investigaciones por narcotráfico. Este hombre salió corriendo cuando vio a los policías y ahora se encuentra en calidad de prófugo.

Los mismos nombres que hace más de una década y media se repiten en las causas judiciales. Drogas, cárceles, punteros políticos...

El fiscal Gavier sostiene que Sosa lideraría una asociación ilícita conformada por Alejandra Vázquez, el hijo de ella -Gastón-, Elio Juncos y el guardiacárcel Casado. El objetivo era sobornar a los guardias para ingresar teléfonos adentro de la cárcel, realizar estafas virtuales (el call center tumbero) y, además, continuar con el negocio del narcotráfico en la parte externa del penal.

Los últimos operativos ordenados por Gavier, con el secuestro de la cocaína como la gran novedad, no le auguran al Chancho una pronta salida de prisión. Por más que abrigue la esperanza de que la Justicia lo comience a percibir con la pretenciosa simpatía de un delfín.

Policiales ilustrados

Producción periodística: Juan Federico.

Producción artística: Nicolás Sánchez.

Idea y realización: Leo Castellano.

Dirección general: Sergio Suppo.

Te puede Interesar

Narcotráfico en Córdoba

El operativo fue ejecutado por la Policía Federal en villa La Maternidad, de la ciudad de Córdoba. Hay cuatro detenidos.

Narcotráfico

El fiscal Enrique Gavier sostiene que desde la cárcel el narco lideraba una asociación ilícita que cometía diferentes delitos. En la casa de una de sus parejas, hallaron seis kilos de cocaína.

Inseguridad en el país

La fiscal rosarina, Valeria Haurigot cuestionó que le dejen utilizar teléfonos a los detenidos. Aseguró que en el 90 por ciento de los hechos aparece alguna conexión con las cárceles.

Consumo

El evento de venta online con descuentos en las marcas más importantes del país se realizará hasta el 1 de junio.