Lupita

Medidas económicas

El gobierno de científicos que investiga lo más obvio

03/03/2020 | 13:12 | El Banco Central promete escudriñar a 11 millones de argentinos que compraron dólares. Necesidades del relato. La respuesta ya la sabemos. Y es la misma para la fuga de la era K.

Alberto Fernández usó su speech ante el Congreso para empezar a escribir su propio relato. El “Nunca más a la deuda”. Como buen populista, exigió definiciones. De un lado, dijo que en el tema de la deuda hay gente con intereses distintos a los del país, y que es hora de definir de qué lado va a estar cada uno. “Nosotros estamos del lado del pueblo”, sostuvo. O sea, cualquiera que no piense como él estará en contra del pueblo.

Con ese colador de patriotas en la mano dijo que el Banco Central va a analizar los préstamos del FMI y cómo se fugaron miles de millones de dólares. Luego, el Banco Central hizo trascender que en tres semanas tendrá el informe. Menos mal que se trata de un gobierno de científicos, porque piensan analizar las transacciones cambiarias de 11 millones de Cuits, de los cuales 4 millones compran y venden dólares en forma regular.

Es un poco para meter miedito y otro poco para seguir deslegitimando a millones de argentinos que huyen desde hace décadas al dólar para librarse de pesos inservibles que la clase política no sabe defender. Necesidades del relato ante una política económica que sigue emitiendo pesos en medio de un cepo.

Las mentiras y medias verdades

El gobierno habla de “dólares que se fugaron del país”, como si millones de José López hubieran revoleado bolsos por sobre el río de la Plata a Uruguay. Falso. Se dice que esos dólares se fugan porque salen del circuito económico. Algunos irán fuera del país, pero la mayoría va al colchón o a las 700 mil cajas de seguridad bancarias que hay en el país sin moneda. No hay 4 millones de traidores a la Patria. Hay millones que tratan de eludir el saqueo inflacionario. Y que no confían. Por eso invierten esos dólares que quedan congelados, desactivados, en un país sin capital.

La enorme mayoría de los dólares del FMI, por otro lado, se usaron para sustituir, a menor tasa de interés, deudas que vencían y que nadie quería renovar.

Fernández dijo que el Congreso debería controlar la deuda, como manda la Constitución. No se entiende para que le pidió entonces superpoderes para negociar con los bonistas en dos leyes. Incluso ya hay una comisión bicameral de seguimiento de la deuda que el oficialismo no convoca.

Finalmente, el Banco Central puede investigar todo lo que quiera. Debería investigar también los 102 mil millones de dólares que se fugaron en los 12 años K, pese a que en los 4 últimos años hubo cepo y en los primeros hubo default: no había que pagar deudas. Pese a eso se fugaron más dólares que los 70 mil millones que salieron del sistema con el fracaso de Macri.

No va a servir de mucho, pero si en verdad se pone a investigar, el Banco Central no va a terminar nunca. Hace 70 años que fugamos divisas en el país decano de la inflación mundial.