A los británicos también les gusta profundizar la grieta

Detrás de sus Ojos está concebida para profundizar la grieta . La serie protagonizada por Eve Hewson lideró en Argentina el ranking de Netflix y generó en cada casa interminables discusiones porque cinco de sus seis episodios insinúan algo que se desmorona en el último, después de un volantazo que se lleva puesta la historia ,el género y el formato.

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El guión, basado en la novela de Sarah Pinborough, mezcla en dosis exactas costumbrismo y suspenso. Una joven mujer divorciada ,Louise(Simona Brown) sale a tomar una copa después del trabajo y conoce a David (Tom Bateman) por quien siente una atracción evidente. Sellan la despedida con un beso y cada uno vuelve a su casa pero al día siguiente cuando ella concurre a su trabajo de secretaria, se da con la noticia de que ha llegado un nuevo psiquiatra .Por supuesto , es él.

"Detrás..." tiene los típicos elementos que dos décadas atrás hicieron historia cuando Glenn Glose se cruzò en el camino de Michael Douglas en Atracción Fatal. Louise se choca literalmente con Adele (Eve Hewson, la hija de Bono ), una mujer bella e intensa que insiste en hacerse perdonar el accidente con un café y que , desde entonces y hasta el final, se empeña en cultivar una amistad que el espectador percibe todo el tiempo como peligrosa.

El suspenso va in crescendo cuando la relación entre el psiquiatra y su secretaria atraviesa los lìmites del coqueteo ,por un lado, mientras que por el otro Adele sigue frecuentando a Louise ,a quien elige como única amiga .Ignora, por supuesto, que la joven con la que intercambia confidencias y acompaña al gimnasio, trabaja de día con su marido y empieza a compartir algunas de sus noches.

Steve Lighfoot, el director de la miniserie británica, se las arregla para mantener a la audiencia atrapada por la inminente resolución del triàngulo que todo el tiempo parece a punto de dejar de estar oculto. Exactamente en ese punto deciden abandonar a los fanáticos del suspenso y tal vez para conquistar a otro tipo de público, le añaden elementos sobrenaturales y paranormales que hasta entonces ni habían insinuado.

La mayoría se enoja por el final y busca explicaciones, pero para entonces han visto los seis capítulos y convertido a la serie en un éxito.La autora del libro aclaró que fue ella y no un productor ocasional el responsable del desenlace y que está orgullosa del resultado. Hay que verla .