Ni cerca de Alfonsín

 Corría 1986 y el por entonces presidente Raúl Ricardo Alfonsín presentaba el proyecto Patagonia, por el cual proponía el traslado de la Capital Federal a un nuevo distrito conformado por las ciudades de Viedma, en Río, Negro y Carmen de Patagones, en la provincia de Buenos Aires.

Esa idea visionaria de Alfonsín fue lanzada por cadena nacional el 15 de abril de 1986 .Y al día siguiente, desde Viedma, Alfonsín convocó a los argentinos a crecer hacia el sur, hacia el mar. No era un proyecto alocado, no fue humo, no fue improvisado. En su discurso, que lo estuve revisando. Alfonsín habló de una decisión de alta responsabilidad, de la búsqueda de una solución profunda para un tema que en el pasado suscitó diversos conflictos que perturbaron la todavía no consolidada organización nacional,recordó Alfonsín, y las controversias apasionadas, los desencuentros históricos y las graves perturbaciones que la capitalización de Buenos Aires trajo al desarrollo general de la República desde 1880 en adelante. Mencionó Alfonsín La coincidencia en el diagnóstico por parte de destacados hombres públicos , historiadores y sociólogos.

Mostró Alfonsín las decisiones similares que tomaron otras naciones que fueron en ese camino, como Australia, Canadá o más cerca , Brasil. Mencionó Alfonsín la deformación que generan las desmesuradas megalópolis convertidas en capitales.Cómo el crecimiento metropolitano, destroza la base del federalismo. Comparaba Alfonsín las dos tendencias que aún imperan ; la tendencia centralista y unitaria y la descentralizadora y democrática. Decía que para algunos Buenos Aires era necesaria y para otros la capital en esa ciudad comprometía el desarrollo equitativo del país. Nos contaba Alfonsín que las capitales que coinciden con metrópolis económicas y demográficas producen sistemas centralizados y que, en cambio, las capitales administrativas, alejadas de las grandes centros dominantes, ayudan a consolidar un régimen federal con equilibrios entre las regiones de todo el territorio. Todo eso nos contó Alfonsín. No sólo eso. No hizo solamente un anuncio presentó un anteproyecto de ley para trasladar la capital a Viedma y Carmen de Patagones. Creó un Consejo para la Consolidación de la Democracia. Es decir, estuvo pensado con argumentos sólidos para una transformación del país y después nos lo contó y lo envió al Congreso.

Me acordaba de todo esto y lo volví a leer y escuchar el discurso de Alfonsín y lo comparaba con el discurso de hacer de Alberto Fernández en Tucumán que así a tientas y a locas dijo que la capital debería mudarse al norte del país rodeado del gobernador de Tucumán de un lado, Wado de Pedro del otro y el jefe de gabinete Juan Manzur.

Dijo Alberto Fernández todos los días pienso si la ciudad capital de Argentina no tendría que estar en un lugar distinto a Buenos Aires y no tendría que tal vez venirse al norte para darle así todo el potencial que generó. Comparando con aquel discurso de aquel proyecto de Alfonsín,no sólo nos quedamos con este pobre Fernández, sino que salió Juan Grabois hoy pidiendo una consulta popular para convertir en ley el traslado de la capital. Además de estas palabras de Fernández y de Grabois ¿hay algún proyecto serio en el Gobierno? O Alberto tira esto en medio de tantos otros problemas que tiene que resolver y que no puede. El traslado de la capital, la verdad, a mí me parece un tema muy serio, muy importante como para tomárselo de manera liviana.

Hace años que nos debemos el debate y el traslado. Ahora lo tira Alberto .No es la primera vez que Alberto se quiere poner el traje de Alfonsín y no es la primera vez que me parece que ese traje le queda grande, demasiado grande.