#OperativoVerano2019
30/01/2019 | 12:47 |
A 25 kilómetros del centro de Bariloche, se encuentra este asentamiento europeo, que comenzó a implementar esta técnica traída desde Chile.
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La "cocción del curanto" es una tradición milenaria para la cocción de alimentos que nació en el archipiélago de Chiloé y consiste en usar piedras calientes enterradas en un hoyo.
"Durante una hora veinte no salen espacios de aire y se concentra el calor en una especie de bóveda que queda hermética 100%", precisó.
El plato típico consiste en tapa de nalga con la que se arma un guiso casero de pollo, zapallo, zanahoria, papa, batata y manzana. "Todo ese popurrí va en una bandeja a la parrilla y se sirve para uno para dos, para que la gente lo pueda compartir", señaló.
Los alimentos se obtienen de ferias comunitarias en la colonia, ubicada a 25 kilómetros del centro de Bariloche y los alimentos no se salan sino que se comen al natural.