Opinión
Reformas en la Copa Davis 2019: cambia magia por dinero
21/08/2018 | 10:47 |
Dejará de ser la Ensaladera "de plata", para ser la Ensaladera "por plata".
Jorge Parodi
La Copa Davis siempre fue un sueño, que se convirtió en obsesión hasta que Argentina logró ganarla en 2016. Desde el año próximo, el certamen de países por la Ensaladera de Plata, que se disputa hace 118 años, se jugará de otra manera.
Una suerte de Copa Mundial de Tenis con 18 países reunidos en sede neutral, que se disputará anualmente. Será otra cosa, diferente, distinta.
La ITF (Federación Internacional de Tenis) anunció “una transformación histórica” que llega de la mano de Gerard Piqué, fundador y presidente del grupo Kosmos, que coorganizará el evento.
El marido de Shakira cuenta en Kosmos con el respaldo financiero de HiroshiMikitani, presidente de Rakuten, el gigante japonés del comercio electrónico. La misma compañía que patrocina al Barcelona.
El plan de asociación, con un horizonte de 25 años, supondrá la inversión de 3.000 millones de dólares. Vale repasar algunos puntos del proyecto aprobado:
- ¿Cuándo? Se celebrará durante siete días en noviembre, acabada la temporada ATP, en las fechas tradicionales de final de Copa Davis.
- ¿Dónde? En sede neutral, Madrid y Lille (Francia) se pelean para albergar la primera edición.
- ¿Quiénes? La disputarán 18 países. Los 16 clasificados para el Grupo Mundial y dos naciones por invitación.
- ¿Cómo? Formato round-robin como en el Masters, divididos en grupos. Seguido de fase eliminatoria a partir de cuartos de final.
- ¿Sistema? Cada partido (nación contra nación) constará de dos individuales y un dobles al mejor de tres sets. Actualmente se juega a cinco, con dos individuales el viernes, el dobles el sábado y otros dos individuales el domingo.
A partir de todo esto, sinceramente, me inundan sensaciones encontradas.
Es verdad que la reiterada ausencia de las figuras aconsejaba una alternativa adaptada a los tiempos, sin viajes o cambios de superficies en plena temporada de ATP.
Jugar la Davis es un honor, pero también una responsabilidad. Y para muchos era más fácil proteger sus intereses individuales, que someterse a esa exposición.
Hay que aceptar esta nueva Davis como un avance, de acuerdo. Pero eso no consuela la pena de asumir que ya nunca viviremos episodios heroicos, jornadas inolvidables.
Es que la Davis genera algo inexplicable, único, que no se repite durante el circuito de ATP.
Es probable que la Copa Davis pase a ser un torneo más.
La Copa Mundial acabará con las eliminatorias en casa, y eso quiere decir adiós a la posibilidad de que los tenistas jueguen ante los ojos de su público de forma esporádica y hasta nunca a la magia de un formato que pese a todo mantenía el encanto.
La Asociación Argentina de tenis votó a favor de estecambio afirmando que es mucho el dinero que llegará a sus alicaídas arcas.
Roger Federer se manifestó en contra de la reforma y David Nalbandian, a través de las redes sociales fue lapidario:
“Here lies the Davis Cup, 1900-2018" (Aquí yace la Copa Davis), fue el Instagram del Rey David, que escribió "una lástima" y utilizó una imagen difundida en Twitter por Judy Murray, la madre de Andy.
Es cierto que los nuevos tiempos exigen cambios.
Pero el riesgo de grande, si sólo se tiene en cuenta la recompensa económica.
El peligro cierto es la pérdida de la esencia de una competencia sin igual.
En definitiva, la Davis cambia “magia” por dinero.
Sería grave que la Ensaladera De Plata se convierta en la Ensaladera POR plata.