Faltan ocho días: entre procesiones y mítines

España a las urnas

Faltan ocho días: entre procesiones y mítines

20/04/2019 | 08:59 |

Ocurrió en una celebración del gremio petrolero, en un restaurante de Minatitlán, Veracruz. Entre los fallecidos hay un bebé.

Adrián Cragnolini

Qué se vota: el domingo 28 de abril los españoles votarán para elegir al presidente del gobierno para los próximos cuatro años. Encabeza las encuestas el actual inquilino de la Moncloa, Pedro Sánchez por el Partido Socialista Obrero Español.

Completan el cartel de posibles aspirantes Pablo Casado por el Partido Popular, Pablo Iglesias por Podemos y Albert Rivera por Ciudadanos. El resto no tiene posibilidades, salvo morrocotuda sorpresa.

Los valencianos tienen otra convocatoria adicional ese mismo día, para elegir presidente de la comunidad, que integran tres provincias: Valencia, Alicante y Castellón.

Campaña a medio gas: la Semana Santa le ha bajado dos cambios a la intensidad de las caravanas proselitistas. La gente goza de un largo puente y merman las voluntades para asistir a un acto partidario.

El continente sobre el contenido: en la última semana los titulares de los medios enfocaron la polémica sobre si habría o no debate entre los principales candidatos. Que no, que sí, que yo no voy, que yo sí, que aquel no quiere debatir...al final habrá dos debates. Uno este lunes en la TVE y el otro 24 horas después en una TV privada.

El refranero español ya lo había previsto: “¿no quieres debate? Pues toma dos tazas. A seducir a los indecisos: casi todas las cartas están sobre la mesa, las encuestas hace rato que marcan las mismas tendencias, pero ay, el ancho de bastos y el siete de espadas están boca abajo en algún lugar del montoncito. Son los indecisos, entre dos y tres españoles de cada diez, que aun no tienen decidido la boleta que van a echar en la urna. Lo mismo ese domingo ni van a votar. Para ellos serán los últimos mensajes de los partidos, buscando atraer a esas voluntades a las que estas cosas ni fu ni fa.

El patriarcado resiste: en pleno empoderamiento de la mujer, los hechos ratifican que el camino por recorrer en este sentido será largo y complejo. Todos los candidatos con aspiraciones serias de llegar al gobierno son hombres. Ellas están, sí, pero en esa segunda línea que sigue siendo el techo de cristal.