Política y Economía

Denuncian a Báez por un depósito de US$ 9,5 millones

27/05/2013 | 06:30 | El BCRA alertó a la UIF por una operación bancaria que realizó en 2010 en la sucursal Comodoro Rivadavia del Banco Nación. El empresario K no pudo acreditar el origen y destino de los fondos.

El Banco Central alertó este año a la Unidad de Investigaciones Financieras por un depósito de US$ 9,5 millones que realizó el empresario K, Lázaro Báez en una sucursal de Comodoro Rivadavia del Banco Nación.

El jueves 16 de diciembre de 2010 Báez depositó dos millones de dólares, los cambia a pesos y los deposita en una cuenta de Austral Construcciones, compañía de su propiedad; con los otros 7,5 millones abre cuatro plazos fijos a su nombre y al de Epsur SA, otra firma vinculada con él.

El informe vino del Banco Central, que consideró que no se acreditaron debidamente el origen y el destino de los fondos.

Es una de las dos alertas de sospechas por actividades de Báez recibidas por la UIF.

El 19 de abril pasado ese organismo promovió la unificación de dos expedientes contra Báez y empresas vinculadas con él.

El primero, de 2009, da cuenta de la "tenencia física" de Báez de 9,3 millones de pesos y muestra, además, cómo el empresario compitió en una licitación en Tierra del Fuego contra sí mismo.

El segundo se refiere a los 9,5 millones de dólares que Báez llevó al Banco Nación para depositar y abrir los plazos fijos.

Estos documentos forman parte de la información que el juez federal Sebastián Casanello le solicitó a la UIF.

El Banco Nación, que recibió los fondos, no cuestionó el movimiento, pero a juicio del Banco Central fue una operación sospechosa de lavado. Así se lo hizo saber la entidad a la UIF el 15 de febrero de este año.

Cuando Báez constituyó los plazos fijos, debió presentar una declaración jurada sobre el origen y la licitud de los fondos.

En esas circunstancias declaró que el dinero provenía de su actividad comercial y se comprometió a presentar la documentación respaldatoria en un plazo no mayor a cinco días.

El otro expediente contra Lázaro Báez data del 3 de diciembre de 2009 y se inició por una denuncia del entonces presidente del Instituto Fueguino de Turismo, que alertó sobre irregularidades en una licitación ganada por una firma de la que el empresario es accionista, en 2008, en Tierra del Fuego, para la concesión integral de una hostería.

El Tribunal de Cuentas de Tierra del Fuego advirtió que la empresa ganadora no tenía acreditados fondos suficientes para el negocio; entonces, la firma adjudicataria informó que el respaldo patrimonial de la inversión iba a estar dado por la "tenencia física" de 9.300.000 pesos de Lázaro Báez y otro 1.800.000 de su hijo Martín, ambos accionistas.

La empresa que ganó se llama Hostería Petriel SA; derrotó a una unión transitoria de empresas formada por Hostería Petriel SA y Badial SA. De acuerdo con lo informado a la UIF, ambas entidades tendrían la misma composición societaria y los mismos órganos de administración.