Liga de Campeones
18/09/2018 | 08:50 |
Fue 4-0 en el Camp Nou, por la primera fecha del Grupo B. El astro rosarino marcó tres tantos, uno mediante una genialidad de tiro libre. Ousmane Dembélé hizo el restante. Mirá.
Barcelona goleó 4-0 al PSV Eindhoven, con un triplete de Leo Messi, este martes en la primera jornada de la Liga de Campeones, en un partido que los azulgranas dominaron de principio a fin.
Messi abrió el marcador con un gran tiro libre desde la frontal del área (32), Ousmane Dembélé hizo el 2-0 (75) y el argentino rubricó el 3-0 (77) antes de repetir por tercera vez de tiro cruzado (87), en un partido que el Barça acabó con diez por la expulsión de Samuel Umtiti (79).
El capitán azulgrana ya había advertido que la Orejona, que se le resiste al Barça desde 2015, iba a ser un objetivo prioritario esta temporada y el camino hacia la final no podía haber empezado de mejor manera.
La victoria supone tres puntos de oro para encabezar el grupo B, empatado con el Inter de Milán, que se impuso este martes 2-1 al Tottenham en el otro encuentro de la llave.
La victoria prolonga la racha de resultados del Barça esta temporada, que acumula cinco partidos oficiales sin perder entre Liga y Champions.
Golazo de Icardi para el triunfo del Inter
El Inter de Milán derrotó 2- 1 al Tottenham después de ir perdiendo cuando faltaban cinco minutos para el final, este martes en el estadio Giuseppe Meazza, en partido correspondiente a la primera fecha de la llave B de la Liga de Campeones.
En un duelo entre dos equipos que pasan por dificultades en sus respectivos campeonatos, un gol de volante danés Christian Eriksen (53) dio ventaja a los Spurs, pero el argentino Mauro Icardi (85) logró la igualdad con una excelsa volea, y el uruguayo Matías Vecino (90+2) dejó tres valiosos puntos en Milán en un complicado grupo, que completan el Barcelona y el PSV Eindhoven.
El club italiano regresaba a la máxima competición europea después de seis años de ausencia, un lapso demasiado largo para un club que atesora tres Champions en sus vitrinas. Así, no es de extrañar que el estadio milanista explotase de júbilo con el gol de Vecino de cabeza.