Al final, ¿Córdoba es rebelde o conservadora?

Aborto

Al final, ¿Córdoba es rebelde o conservadora?

07/08/2018 | 13:40 |

El voto de los legisladores sobre el aborto es otro quebradero de cabezas para quienes gustan elucubrar sobre la identidad cordobesa.

Adrián Simioni

Qué manera de estar en contra. Y siempre contra la lógica. La espinosa votación sobre la despenalización del aborto vuelve a mostrar la faceta “anti” de Córdoba, esta vez a través de sus legisladores.

A ver: aunque eso ya ha quedado superado por cambios de reglas constitucionales y electorales, se supone que una cámara como la de Diputados, tradicionalmente, representa a los sectores más jóvenes, fogosos y reformistas. Y que el Senado acoge a políticos que pueden ser de todas las tendencias pero en general son mayores, serenos y conservadores.

Para decirlo sin vueltas: según esa tradición que ya es casi una leyenda, lo más esperable es que Diputados sancionara la despenalización y que el Senado la rechazara.

Y eso es lo que sucedió en la Cámara Baja y lo que podría suceder en la Alta si el poroteo de votos se cumple.
Sin embargo, los diputados cordobeses votaron en contra de la ley. Y los senadores se aprestan a votar a favor en el Senado.

En Diputados la ley salió por 129 votos a favor y 125 en contra. En cambio, los diputados cordobeses votaron 12 en contra y 5 a favor, mientras otro se abstuvo. Significa que Córdoba aportó, en términos netos, 7 votos al grupo que rechazaba la norma. Junto a Salta, fue el distrito que mayor diferencia de votos aportó al rechazo al aborto. Es decir: fue “súperconservadora” en la supuesta cámara rebelde y, por supuesto, en contra de la mayoría.

En el Senado, todo indica que los tres legisladores cordobeses van a votar a favor de la despenalización (con cambios, pero en definitiva a favor). Si llega a ser así será, junto Chubut, la única provincia en aportar el total de sus votos a favor de despenalizar, a menos que la neuquina Lucila Crexell se defina a favor, lo que sumaría a Neuquén al podio. Es decir, el voto cordobés sería “súperprogre”, en la cámara conservadora y quedando, otra vez y por supuesto, en minoría.

Es todo un desafío para quienes desde hace década elucubran sobre el “ser provincial” y nunca terminan de decidirse acerca de si Córdoba es “revolucionaria” o “conservadora”. Para todos ellos, el voto sobre el aborto aportará, seguramente, otro irresoluble quebradero de cabeza.