El verdeo de invierno más utilizado es la avena.

Agro

Recomiendan raigrás, avena y trigo para suplementar las pasturas durante el invierno

15/05/2011 | 08:38 | Estos tipos de forraje aportan entre el 16 % y el 20% de proteínas. En la época invernal la producción de las pasturas perennes está limitada por las bajas temperaturas y la escasez de humedad.

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Juan Mattera: "Estas pasturas son muy importantes porque vamos a tener forraje de muy buena calidad".

Los verdeos de invierno ocupan un rol clave porque aportan forraje en una época del año que es crítica en cuanto a la disponibilidad de pasto disponible en los sistemas ganaderos, ya sea de producción de carne o de leche porque las pasturas van decreciendo su taza de crecimiento y se acumula menos pasto.

Entre los cultivos forrajeros con mejores posibilidades para adecuarse a esas condiciones, se encuentran la avena, el raigrás y el trigo como las especies de mayor importancia teniendo en cuenta su difusión y el panorama varietal que presentan.

“Los aportes de estas pasturas son muy importantes porque vamos a tener forraje de muy buena calidad y se consigue buen volumen de pasto como para complementar algún pastoreo”, aseguró el ingeniero agrónomo Juan Mattera, técnico del INTA Rafaela.

Estos tipos de forraje dan un buen aporte proteico, entre el 16 % y el 20% de proteínas, que en los sistemas de producción de leche son nutrientes importantes. Luego variará en función de la especie que se siembre, si es avena o raigrás.

Por esta razón y para maximizar el aporte de forraje al sistema debe elegirse bien la especie y cultivar adecuados teniendo en cuenta, no solo el rendimiento total de forraje sino también la curva de producción y la estabilidad de la misma a través de los años, las necesidades del establecimiento y las condiciones edafoclimáticas de la zona.

“Hay que tener en cuenta la planificación de cómo vamos a requerir tener forrajes durante el invierno”, sostuvo el especialista y aclaró que en función de eso “hay que evaluar qué especie y cómo se encadenan distintos verdeos para obtener opciones distintas de forrajes en todo el período invernal”.

Según los datos aportados por Mattera, en el caso de la avena y raigrás, la época propicia para realzar la siembra es entre marzo y abril porque “se logra implantar el cultivo temprano y se puede hacer un primer pastoreo en el cual no se extienda mucho el período”. Si se utiliza el trigo como verdeo, la fecha puede ser un poco más tardía y se puede hacer en mayo.

El verdeo más utilizado es la avena porque “tiene muy buena producción de forraje y se logran entre 4.000 y 6.000 kilos”, aseguró el ingeniero.

Se pueden utilizar avenas con ciclos cortos para aprovecharlas temprano y otras de ciclos un poco más largos que aportan rebrotes más tardíos. Se pueden combinar con trigo y en el caso de hacerlo con el raigrás va a dar la oportunidad de extender el pastoreo un poco más hacia la primavera.

En el caso de raigrás, las producciones también son muy buenas, de 4.500 a 6.500 kilos de materia seca de forraje. “Esta es una especie muy interesante en cuanto a la calidad pero hay que tener en cuenta que e s una especie que requiere más humedad”, sostuvo.

El trigo también es una opción interesante. “Se deben utilizar especies de ciclos largos que tienen una buena producción de follaje con lo que se pueden lograr tranquilamente tres pastoreos y tiene mayor tolerancia a la humedad en el suelo si es que el año se perfila con escasas reservas”, comentó.

Por último, Mattera se refirió a la fertilización de los verdeos y explicó que “si se apunta a lograr buenas producciones de forrajes, hay que pensar que son gramíneas y que tienen n gran requerimiento de nitrógeno y una muy buena respuesta al fertilizante nitrogenado”.