ONU alerta sobre posible conflicto en Siria, pero brinda esperanza con levantamiento de sanciones

NACIONES UNIDAS (AP) — El representante principal de la ONU para Siria, Geir Pedersen, expresó el miércoles su preocupación por los "peligros reales de un conflicto renovado y un enfrentamiento más profundo" en el país afectado por la guerra. Sin embargo, también se mostró esperanzado ante las mejores perspectivas para la población, gracias a las decisiones de Estados Unidos y la Unión Europea de levantar las sanciones.

Pedersen destacó las vulnerabilidades presentes en esta nación multiétnica y la "urgente necesidad de abordar la creciente polarización". Mencionó incidentes de violencia contra la minoría drusa a finales de abril y los asesinatos ocurridos en áreas de la comunidad alauita en marzo.

“Los desafíos que enfrenta Siria son colosales, y los peligros de un conflicto renovado y una fragmentación más profunda todavía están latentes”, expresó durante una reunión del Consejo de Seguridad de la ONU.

A pesar de ello, Pedersen mencionó que la población siria mantiene un optimismo cauteloso, confiando en que el anuncio del presidente Donald Trump la semana pasada sobre el retiro de sanciones y el anuncio similar de la UE el martes les otorgue una mejor oportunidad de prosperar ante grandes adversidades.

Desde Damasco, Pedersen señaló que el alivio de las sanciones, también por parte del Reino Unido el mes pasado, así como el apoyo financiero y energético de Arabia Saudí, Qatar y Turquía, constituyen "acontecimientos históricos".

“Tienen un gran potencial para mejorar las condiciones de vida en todo el país y para respaldar la transición política en Siria”, acotó el enviado especial de la ONU. “Y proporcionan al pueblo sirio la oportunidad de sobrellevar el legado de mala gestión, el conflicto, los abusos y la pobreza de la que están intentando salir”.

El expresidente sirio Bashar Assad fue derrocado el año pasado tras una ofensiva de los rebeldes después de una guerra de más de 13 años, poniendo fin a más de 50 años de régimen familiar. La nueva administración, encabezada por Ahmad al-Sharaa, ha manifestado que el patrimonio de convivencia en Siria debe preservarse a toda costa, aunque el país se enfrenta a grandes retos.

Actualmente, aproximadamente el 90% de los ciudadanos sirios vive en condiciones de pobreza, y 16,5 millones necesitan protección y ayuda humanitaria, incluidos casi 3 millones que sufren inseguridad alimentaria profunda, de acuerdo con Ramesh Rajasingham, coordinador de la división humanitaria de la ONU, quien hizo un informe al consejo.

El secretario de Estado de EE.UU., Marco Rubio, advirtió que Siria está potencialmente "al borde del colapso", lo que podría causar una guerra civil y que el país se convierta nuevamente en "un campo de batalla" para el grupo Estado Islámico y otros grupos militantes.

Pedersen, por su parte, mencionó que el Estado Islámico ha intensificado sus ataques en diversas áreas de Siria en las últimas semanas, y que existen indicios de operaciones más organizadas usando dispositivos explosivos improvisados y armamento de medio alcance.

Rubio afirmó que no hay garantías de que el levantamiento de sanciones y el trabajo con la nueva administración de al-Sharaa vayan a tener éxito, pero advirtió que si EE.UU. no realiza esfuerzos, "se garantiza que no funcionará". Dijo que el anuncio de Trump respecto al alivio de sanciones ha motivado a naciones asociadas en la región y en el ámbito árabe a colaborar para estabilizar al país.

“Nadie debería asumir que esto será sencillo, porque no lo será”, resaltó Rubio. Sin embargo, enfatizó que si Siria logra estabilizarse, esto traería una estabilidad más amplia en la región, incluyendo Líbano, Jordania e Israel. “Es una oportunidad histórica que esperamos se concrete”, concluyó. “Haremos todo lo posible para que esto sea exitoso”.

John Kelley, coordinador político de la misión de EE.UU. ante la ONU, informó al consejo que “las agencias del gobierno de EE.UU. están trabajando para implementar la instrucción del presidente sobre las sanciones a Siria”.

“Esperamos emitir las autorizaciones necesarias que serán cruciales para atraer nuevas inversiones a Siria, facilitando la reconstrucción de la economía siria y guiando al país hacia un futuro brillante, próspero y estable”, manifestó. Además, mencionó que EE.UU. ha dado los primeros pasos hacia la normalización de relaciones diplomáticas con Siria.

Se ha exhortado al gobierno de transición sirio a tomar “decisiones audaces” alineadas con las expectativas del presidente Trump, como establecer la paz con Israel, retirar rápidamente a los combatientes militantes extranjeros y asegurar que extremistas extranjeros, como ciertas milicias palestinas, no operen desde Siria, así como colaborar en la prevención del resurgimiento del EI.

El embajador adjunto de Siria ante la ONU, Riyad Khaddour, alabó la “valiente decisión” de Trump de eliminar las sanciones, así como su reunión con al-Sharaa. Además, enfatizó el apoyo de la Unión Europea, el Reino Unido, Arabia Saudí, Turquía, Qatar y los Emiratos Árabes Unidos “para respaldar a Siria en su avance con confianza y esperanza”.

“La nueva Siria” anhela establecerse como “un Estado de paz y asociación, no como un campo de batalla para conflictos o un palacio para ambiciones extranjeras”, sentenció.