Crisis empresarial
12/06/2025 | 16:49
Redacción Cadena 3
El reciente accidente de un Boeing 787 en la India, ocurrido inmediatamente después del despegue, volvió a centrar la atención en el fabricante norteamericano, aunque aún se desconoce la causa del siniestro.
La aeronave de Air India se precipitó en la ciudad de Ahmedabad con más de 240 pasajeros a bordo, marcando el primer incidente fatal del Dreamliner desde su presentación en 2009, según la Red de Seguridad de la Aviación. Tras la noticia, las acciones de Boeing vieron una caída superior al 4% en las operaciones de la tarde.
El 787 fue pionero en el uso de baterías de ion de litio en aviones de pasajeros, las cuales, a pesar de ser más ligeras, pueden presentar riesgos. En 2013, la flota de 787 fue inmovilizada temporalmente debido a problemas de sobrecalentamiento, que en ciertos casos llevaron a incendios.
El 737 Max, otra versión de Boeing, ha sido fuente de constantes polémicas tras los accidentes de 2018 en Indonesia y 2019 en Etiopía, donde perdieron la vida 346 personas.
El fallo se generó por un sensor defectuoso que proporcionaba lecturas incorrectas, lo que daba lugar a la pérdida de control de la aeronave. Posterior al segundo accidente, se suspendió globalmente la operación de este modelo hasta que la empresa implementó un rediseño del sistema.
Recientemente, el Departamento de Justicia de Estados Unidos llegó a un acuerdo para que Boeing evitara un juicio penal tras supuestos engaños a los reguladores sobre el 737 Max antes de los accidentes.
Las inquietudes sobre el avión resurgieron nuevamente tras un incidente en Alaska Airlines, donde se desprendió un tapón de puerta en un Max, lo que obligó a los reguladores a restringir la producción del fabricante a 38 aviones mensuales.
Boeing reportó una pérdida de 11.800 millones de dólares en 2024, acumulando desde 2019 pérdidas que superan los 35.000 millones de dólares.
Este complicado panorama se complicó más debido a una huelga de los operarios de ensamblaje en sus plantas de Renton y Everett, Washington, que paralizó la producción y afectó su capacidad de entrega.
No obstante, en los primeros tres meses de 2025, Boeing comunicó una pérdida de 31 millones de dólares, mejorando su situación respecto al año anterior. El CEO, Kelly Ortberg, afirmó que se han logrado avances en la estabilización de las operaciones durante ese trimestre.
Las dificultades laborales y el aumento del control gubernamental hicieron que las entregas de aviones de Boeing disminuyeran en el último año.
La empresa informó haber suministrado 348 aviones en 2024, lo que representa un tercio menos que los 528 entregados en 2023, y menos de la mitad de lo que su competidor Airbus logró, que entregó 766 aviones comerciales.
A pesar de estos problemas, Boeing logró mantener el interés de los clientes. El mes pasado cerró grandes pedidos con dos aerolíneas del Medio Oriente, incluidos acuerdos por 96.000 millones de dólares para aviones 787 y 777X, siendo el mayor pedido de aeronaves de fuselaje ancho en la historia de la compañía.
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Esta noticia fue traducida del inglés por un editor de AP con apoyo de una herramienta de inteligencia artificial generativa.
[Fuente: AP]
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