Exreservista de los marines es encausado por tiroteo en cárcel para inmigrantes en Texas

Un exreservista del Cuerpo de Infantería de Marina de Estados Unidos fue arrestado y acusado de intento de asesinato en relación con un ataque ocurrido en una cárcel para inmigrantes en Texas, donde un policía sufrió un disparo en el cuello, informaron el martes fiscales federales.

Benjamin Hanil Song, de 32 años, es la última persona acusada por el asalto del 4 de julio, en el que atacantes vestidos con ropa de tipo militar abrieron fuego afuera del Centro de Detención Prairieland, en Alvarado, al suroeste de Dallas, según la fiscalía federal para el Distrito Norte de Texas.

Song, originario de Dallas, fue arrestado tras una búsqueda de una semana y ha sido acusado de tres cargos de intento de asesinato de agentes federales y tres cargos de disparar un arma de fuego en relación con un crimen violento, según el comunicado de la fiscalía. Se le acusa de haber comprado cuatro de las armas vinculadas al ataque.

Los registros de la Corte de Distrito federal no incluyen los nombres de los abogados que representan a Song ni las fechas programadas para las comparecencias en la corte. La fiscalía no respondió por el momento un correo electrónico en el que se le preguntó si Song tiene un abogado.

El agente herido en el ataque fue dado de alta del hospital. Diez personas, la mayoría de ellas del área de Dallas-Fort Worth, ya habían sido acusadas de intento de asesinato de un agente federal y de disparar un arma de fuego en relación con un crimen violento. Otra persona enfrentó cargos de obstrucción a la justicia por ocultar pruebas, mientras que otras dos fueron acusadas de ser cómplices después del hecho por supuestamente ayudar a Song a escapar.

Si son declarados culpables, la mayoría de los acusados podría enfrentar penas de hasta cadena perpetua, mientras que aquellos acusados de obstrucción a la justicia y de ser cómplices después del hecho enfrentarían penas menores, según los fiscales federales.

El ataque ocurrió en un contexto en el que el gobierno del presidente Donald Trump ha incrementado las redadas para deportar a inmigrantes. Los atacantes inicialmente lanzaron fuegos artificiales y pintaron con aerosol vehículos y una estructura de vigilancia, con las palabras “Ice Pig” (Cerdo del ICE, siglas del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas), en un intento de atraer a los agentes de correccionales afuera de la instalación. Al recibir el alerta, los agentes de correccionales llamaron al 911 y un agente de policía de Alvarado respondió, momento en el que alguien en el bosque disparó.

Otra persona disparó de 20 a 30 rondas a los agentes de correccionales después de que estos salieron de la instalación. Posteriormente, agentes del sheriff detuvieron a siete personas a unos 275 metros (300 yardas) de donde el agente fue baleado.

El informe penal detalla que los sospechosos estaban vestidos con ropa tipo militar negra, algunos llevaban blindaje corporal y otros estaban cubiertos de barro. Algunos estaban armados y contaban con radios.

Un detective de la oficina del sheriff detuvo una furgoneta que salía del área y encontró dos rifles tipo AR y una pistola, junto con chalecos blindados y un casco. El conductor, la única persona en la furgoneta, declaró haber estado en la cárcel para inmigrantes y que llevó a algunas personas al centro de detención desde Dallas para “hacer algo de ruido”.

Los datos de ubicación del celular de Song mostraron que estuvo cerca del centro de detención desde aproximadamente las 11:30 p.m. del 4 de julio y durante todo el 5 de julio. “Aunque Song escapó escondiéndose durante la noche después del ataque, estábamos seguros de que no permanecería oculto por mucho tiempo”, indicó la fiscal Nancy E. Larson, fiscal federal interina para el Distrito Norte de Texas. “Las 14 personas que planearon y participaron en estos actos atroces serán procesadas, y esperamos que la justicia sea pronta”.