El Departamento de Justicia busca revocar las reformas policiales en Minneapolis y Louisville

MINNEAPOLIS (AP) — El Departamento de Justicia tomó medidas el miércoles para anular los acuerdos con las ciudades de Minneapolis y Louisville, que requerían reformas a sus fuerzas policiales a raíz de los asesinatos de George Floyd y Breonna Taylor, eventos que desencadenaron protestas a nivel nacional en contra de la injusticia racial en el verano de 2020.

Tras un informe contundente emitido por el Departamento de Justicia en 2023, Minneapolis formalizó en enero un decreto de consentimiento con el gobierno federal en los últimos días de la administración de Biden, con el objetivo de reformar sus políticas de formación y uso de la fuerza con supervisión judicial.

Este acuerdo requería la aprobación de un tribunal federal en Minnesota. No obstante, la administración anterior solicitó una suspensión poco después de asumir y, el miércoles, notificó al tribunal que no tiene la intención de seguir adelante con el acuerdo. También se planificaba presentar un requerimiento similar en un tribunal federal de Kentucky.

“Después de una revisión exhaustiva por parte de la actual dirección del Departamento de Justicia y la División de Derechos Civiles, Estados Unidos ya no considera que el decreto de consentimiento propuesto sea de interés público”, afirmó Andrew Darlington, jefe interino de la sección de litigios especiales de la División de Derechos Civiles del Departamento de Justicia.

“Estados Unidos ya no seguirá en este asunto”, añadió.

El anuncio por parte del Departamento de Justicia llega justo antes del quinto aniversario del asesinato de George Floyd. En el trágico evento, el exoficial Derek Chauvin inmovilizó a Floyd con la rodilla en el cuello durante más de nueve minutos, provocando una ola de protestas a nivel global y un examen crítico de la brutalidad policial y el racismo en Estados Unidos.

A pesar de la decisión reciente, no se anticipan cambios inmediatos que impacten al Departamento de Policía de Minneapolis, que continúa funcionando bajo un decreto de consentimiento similar con el Departamento de Derechos Humanos de Minnesota.

En una conferencia de prensa reciente, el jefe de policía de Minneapolis, Brian O’Hara, aseguró que su departamento se adhirió a los términos del acuerdo federal tal como fue firmado, sin importar las decisiones de la administración Trump.

En 2023, la ciudad alcanzó un acuerdo con el Departamento de Derechos Humanos del estado para revisar la vigilancia policial bajo supervisión judicial, después de que un informe de 2022 determinara que existía un histórico patrón de discriminación racial dentro de la fuerza. La comisionada de Derechos Humanos de Minnesota, Rebecca Lucero, destacó que el decreto estatal “no va a ninguna parte”, indicando que el acuerdo requiere cambios transformadores respecto a la vigilancia policial basada en la raza. “La magnitud del trabajo que debe realizarse aún en el departamento de policía es considerable. Nuestro departamento estará presente en cada paso del proceso”, concluyó Lucero.