EEUU busca deportar a Ábrego García antes del juicio por tráfico de personas

GREENBELT, Maryland, EE.UU. (AP) — El gobierno de Estados Unidos comenzará procedimientos de deportación contra el salvadoreño Kilmar Ábrego García si es liberado de la cárcel antes de ser juzgado por cargos de tráfico de personas en Tennessee, afirmó el abogado del Departamento de Justicia, Jonathan Guynn, ante un juez federal en Maryland el pasado lunes.

Esta declaración de Guynn se contrapone a lo que habían asegurado los portavoces del Departamento de Justicia y la Casa Blanca, quienes indicaron el mes pasado que Ábrego García sería juzgado y posiblemente cumpliría pena en una prisión estadounidense antes que el gobierno proceda a su deportación.

Guynn hizo esta revelación durante una audiencia en un tribunal federal en Maryland, donde la esposa estadounidense de Abrego García está demandando a la administración Trump por haberlo deportado erróneamente en marzo, buscando evitar que sea expulsado nuevamente.

El abogado mencionó que el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas detendría a Ábrego García tras su liberación y lo enviaría a un “tercer país” que no sería su natal El Salvador, aunque no especificó cuál sería dicho país.

Ábrego García se ha convertido en un foco de controversia en torno a las políticas migratorias del expresidente Donald Trump después de haber sido deportado a una famosa megacárcel en El Salvador en marzo. Esta acción violó una orden de un juez federal de 2019 que lo protegía de ser deportado, dado que podría enfrentar persecución por parte de pandillas locales que amenazan a su familia.

En respuesta a la presión creciente y una orden de la Corte Suprema de Estados Unidos, el gobierno de Trump devolvió a Ábrego García el mes pasado para enfrentar cargos federales de tráfico de personas. Los defensores de Ábrego García han calificado el caso como “absurdo” y un intento de justificar su deportación injusta.

Un juez federal en Nashville se disponía a liberar a Ábrego García para que esperara el juicio, sin embargo, accedió a mantenerlo encarcelado a pedido de sus propios abogados, quienes expresaron preocupaciones sobre la posibilidad de que Estados Unidos intentara deportarlo de inmediato, citando “declaraciones contradictorias” de la administración Trump.

El 26 de junio, Guynn informó a la jueza federal de distrito Paula Xinis en Maryland que el gobierno de EE.UU. planeaba deportar a Ábrego García a un “tercer país” que no fuera El Salvador, aunque indicó que no había un cronograma concreto para estos planes de deportación.

Más tarde, el mismo día, Chad Gilmartin, portavoz del Departamento de Justicia, señaló a The Associated Press que la agencia pretende llevar a juicio a Ábrego García por los cargos de tráfico antes de proceder con su deportación.

La portavoz de la Casa Blanca, Abigail Jackson, comunicó en X que Ábrego García “enfrentaría todo el peso del sistema de justicia estadounidense, incluyendo cumplir penas en una prisión estadounidense por los delitos que ha cometido”.

Los abogados de Ábrego García solicitaron a Xinis que ordenara al gobierno trasladar a Ábrego García a Maryland al ser liberado de la cárcel en Tennessee, una medida que evitaría su deportación previa al juicio. Ábrego García había vivido en Maryland, cerca de Washington, por más de una década, trabajando en la construcción y formando una familia con su esposa estadounidense.

La jueza continúa considerando la solicitud de sus abogados para que se le permita trasladarse a Maryland si es liberado. Mientras tanto, el lunes, dictó que la demanda contra la administración Trump, por la deportación errónea de Ábrego García, podrá seguir adelante.

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Finley reportó desde Norfolk, Virginia.

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Esta historia fue traducida del inglés por un editor de AP con la ayuda de una herramienta de inteligencia artificial generativa.