Chelsea avanza en el Mundial tras superar un duro desafío contra Benfica

CHARLOTTE, Carolina del Norte, EE.UU. (AP) — Chelsea logró sortear múltiples interrupciones por tormentas eléctricas en el Mundial de Clubes y, a pesar de perder momentáneamente la ventaja, se clasificó a los cuartos de final tras vencer a Benfica 4-1. La victoria se selló con un trío de goles en tiempo extra, evidenciando la resiliencia del equipo británico.

El primer tanto de Chelsea llegó gracias a un astuto tiro libre del capitán Reece James a los 64 minutos, marcando la ambición del equipo. Sin embargo, un penalti bien ejecutado por el argentino Ángel Di María igualó el marcador, lo que obligó a la prórroga. Esto ocurrió después de una polémica mano señalada a Malo Gusto en el descuento.

A los 108 minutos, Nkunku aprovechó un rebote tras un disparo de Moisés Caicedo, poniendo a Chelsea nuevamente en ventaja mientras Benfica se encontraba con un jugador menos tras la expulsión de Gianluca Prestianni. Este gol desató el júbilo entre los seguidores del Chelsea, quienes habían visto cómo la tormenta había retrasado el encuentro por dos horas.

Con el marcador 2-1, Chelsea continuó presionando al rival y aumentó su ventaja. Pedro Neto y Kiernan Dewsbury-Hall se encargaron de establecer un abultado 4-1 durante el tiempo extra, reflejando así la superioridad del club inglés en el estadio Bank of America.

Después de buscar el gol con distintas jugadas y encontrarse con la respuesta del arquero Anatolii Trubin, finalmente Chelsea encontró la red mediante una jugada de pelota parada. El disparo de James, que sorprendió al arquero luso, fue clave para triunfar en la contienda.

El partido sufrió una larga interrupción debido a una advertencia de tormenta eléctrica, lo que obligó a los jugadores a retirarse a los vestuarios. El protocolo de seguridad establecía que cualquier tormenta en un radio de 8 millas obligaba a suspender el partido, y la reanudación solamente sería posible tras 30 minutos sin actividad eléctrica en el área.

La capacidad del estadio es de 72.500 espectadores, pero la asistencia fue disminuida tras las condiciones climáticas adversas. Los pocos aficionados presentes pudieron presenciar no sólo el empate dramático, sino también el dominio total del Chelsea en la prórroga, que les permitió avanzar de forma contundente con confianza hacia el siguiente encuentro.

En su camino hacia el título, Chelsea se enfrentará a Palmeiras en cuartos de final el próximo viernes, coincidiendo con el Día de la Independencia de Estados Unidos, en un cruce que prometía ser emocionante.