ORGULLO DE CÓRDOBA
09/12/2025 | 14:17
Redacción Cadena 3
El 4 de junio de 1982, en un estudio humilde pero vibrante de la antigua radio LV3, actual Cadena 3, una pianista cordobesa por elección marcó para siempre el destino sonoro de la provincia. Leonor Marzano, creadora del Cuarteto Leo, deslizó sus manos sobre el piano y dio inicio a una historia que trascendería generaciones, fronteras y épocas. Aquella primera presentación fue la antesala de un baile histórico en Pichanas, donde el inconfundible tunga-tunga comenzó a expandirse por el aire como un latido colectivo. Nadie lo sabía entonces, pero ese día Córdoba encontró su identidad musical más profunda.
Inspirado en ritmos europeos como el pasodoble, la tarantela y el foxtrot, el cuarteto nació como una música simple y alegre, adoptada rápidamente por las clases populares que vieron en él una forma genuina de expresión. En clubes barriales, salones sociales y pistas de tierra, el género creció al ritmo del piano, el acordeón, el violín y el contrabajo. Los bailes se convirtieron en rituales comunitarios donde miles de personas celebraban, resistían y se encontraban. Porque el cuarteto siempre fue más que música: fue abrazo, desahogo y pertenencia.
A partir de la década de 1960, el género se expandió aún más. Ritmos caribeños, percusión afrolatina y secciones de vientos renovaron su potencia sonora. El cuarteto atravesó censuras, resistió la última dictadura (1976-1983) y nunca dejó de sonar. Con letras pícaras, románticas o cotidianas, siguió retratando la vida del pueblo, sus dolores y sus alegrías.
Nada de esto hubiera sido posible sin quienes lo defendieron, lo soñaron y lo llevaron más allá de cualquier límite. A la familia Marzano–Gelfo y su Cuarteto Leo, que encendieron la chispa inicial. A La Mona Jiménez, que sostuvo el género con una pasión inquebrantable y convirtió sus canciones en himnos que atraviesan generaciones. A Sebastián, que llevó el cuarteto a cada rincón del país. A Chebere, banda madre que revolucionó el sonido con vientos y guitarras eléctricas. A Trulalá, la “universidad del cuarteto”, con Manolito Cánovas como emblema. A Gary, cuya voz quedó para siempre en la memoria popular. Y al legado imborrable de Rodrigo, quien llevó el pulso cordobés a la escena nacional.
Con el nuevo milenio, una camada renovada volvió a reescribir la historia. Damián Córdoba, Walter Olmos, La Barra, Jean Carlos y decenas de artistas incorporaron elementos electrónicos, fusiones modernas y letras románticas. Hoy, bandas como Q’Lokura, La Konga o la LBC combinan tradición y estética actual, con producciones modernas y estrategias digitales que llevan el cuarteto a públicos jóvenes dentro y fuera de Argentina.
Ese recorrido de más de 80 años tuvo un reconocimiento histórico en 2023, cuando la Legislatura de Córdoba declaró al cuarteto como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Provincia. Un gesto justo, nacido de un proceso iniciado en 2022 por la gestión municipal de Martín Llaryora y continuado por el actual intendente Daniel Passerini. La propuesta, elaborada junto a la Cancillería y el Ministerio de Cultura de la Nación, recogió los aspectos esenciales del género: su identidad, su historia y las prácticas que hacen del cuarteto una experiencia cultural irrepetible.
Y hoy, tres años después, llegó el reconocimiento más grande.
/Inicio Código Embebido/
/Fin Código Embebido/
En la vigésima sesión del Comité Intergubernamental de la UNESCO, realizada en Nueva Delhi, India, el cuarteto fue declarado Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad. Un hito histórico que consagra al tunga-tunga como una de las expresiones culturales más valiosas del planeta.
El cuarteto ya no es solo música de Córdoba: es parte del patrimonio emocional del mundo. Un ritmo que nació en un piano, en manos de una mujer visionaria, y que hoy late en cada rincón donde un cordobés —o quien alguna vez bailó cuarteto— sienta el llamado de su música.
Porque el cuarteto no se explica: se siente. Y desde ahora, se celebra como lo que siempre fue… un tesoro universal.
/Inicio Código Embebido/
¿Qué se declaró Patrimonio Cultural Inmaterial de la Provincia? El cuarteto fue declarado Patrimonio Cultural Inmaterial de la Provincia de Córdoba en 2023.
¿Quién es Leonor Marzano? Leonor Marzano es la pianista creadora del Cuarteto Leo que marcó el inicio de la historia del cuarteto en Córdoba.
¿Cuándo se realizó la declaración de Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad? La declaración fue realizada en 2023 durante la vigésima sesión del Comité Intergubernamental de la UNESCO.
¿Dónde se llevó a cabo la sesión del Comité de la UNESCO? La sesión se realizó en Nueva Delhi, India.
¿Por qué es importante el cuarteto? El cuarteto es importante porque representa la identidad musical de Córdoba y ha sido una forma de expresión cultural y emocional para su pueblo.
Te puede Interesar
Patrimonio de la UNESCO
El género popular cordobés fue declarado Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, en el marco de la vigésima sesión del Comité Intergubernamental de la UNESCO que se desarrolló en Nueva Delhi, India.
Orgullo córdobes
En el documental por los 80 años del cuarteto, La Mona Jiménez lo dice sin vueltas: “Si no hubiera existido el Cuarteto Leo, hoy no existiría el cuarteto”.
Proyectos teatrales y gira
El actor se llevó el premio a mejor actor en serie por su papel en "Menem" y "Las Maldiciones".
Orgullo de Córdoba
En el marco de la declaración del cuarteto como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, repasamos cómo el género adoptó y transformó canciones extranjeras en verdaderos clásicos locales.