Ególatra: las hermanas cordobesas que se animaron al arte del chocolate Dubai

Adriana Joyas y su hermana Virginia, son una de las creadoras de Ególatra, un emprendimiento familiar, que hace arte con chocolate y pistachos.

El proyecto Ególatra comenzó en 2018 como una pastelería tradicional. Con el tiempo, las hermanas viraron hacia la alfajorería y la bombonería de autor, obteniendo importantes premios. Pero fue en la exploración del chocolate de Medio Oriente y en esta búsqueda de tendencias donde encontraron su nueva joya: la tableta Dubai, un producto artesanal, visualmente llamativo y adictivo al paladar.

“Es un chocolate totalmente diferente a lo que estamos acostumbrados, tiene una pasta verde hecha con pistacho natural y una masa llamada kataifi, que parece fideítos finitos, crocantes, horneados en manteca”, explicó Adriana en diálogo con Cadena 3.

La combinación de texturas y sabores da como resultado un chocolate con leche —también disponible en versión blanca— que rompe con lo tradicional. “Una cosa es verla, otra cosa es probarla. Es algo que no se puede parar de comer”, aseguró.

“Nos pasa que vienen papás a comprar la tableta Dubai porque sus hijos la vieron en TikTok y la quieren probar”, contó Adriana. Así, el pistacho —antes reservado a paladares más adultos— conquistó también al público adolescente.

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El chocolate se vende en bloques de 50 gramos, presentados en cajas de 250 o 500 gramos. “La caja grande está a 80 mil pesos, es un producto de élite, pero vale la pena”, explicaron desde Ególatra, que destaca por el uso de materia prima premium: pistacho argentino, chocolate belga y técnica artesanal.

Con presencia fuerte en redes sociales y una propuesta que no para de crecer, Ególatra se posiciona como un exponente de innovación pastelera en Argentina. Lo que empezó como una curiosidad gourmet hoy es una experiencia sensorial que redefine el chocolate y le da identidad local a una receta internacional.

“Nosotras siempre estamos investigando, buscando algo distinto, y cuando vimos este chocolate raro dijimos: lo tenemos que hacer”, contó Adriana. El resultado es un producto que representa lo mejor de La Argentina Posible: sueños que se convierten en realidad, sabores que cruzan fronteras, y emprendedores que se animan a más.

Entrevista de Adrián Simioni