Borinsky, biógrafo de Lionel Scaloni: “Es un tipo que no imposta y sabe liderar”

Diego, es un gusto tenerte aquí. Sos el protagonista del programa de hoy. ¿Cómo llegaste a la decisión de escribir un libro sobre Lionel Scaloni y por qué te decidiste por él? 

Hola, Sergio, el placer es mío. Siempre estoy enganchado con la Cadena de Gol y escucho la segunda mitad de tu programa, así que es muy raro estar anticipándome al programa habitual.

¿Cuándo se publicó la biografía? 

El libro salió el 17 de septiembre. Iba a publicarse a principios de mes, pero como la selección jugaba el 4 y el 9, y Scaloni es muy obsesivo y cuidadoso, la editorial tuvo que distribuirlo especialmente por todo el país a mitad de mes. La idea surge cuando ganó la Copa América, poniendo fin a 28 años de frustraciones desde 1993. Me entusiasmó su perfil y cómo se expresaba en conferencias de prensa, era un caso de estudio. El técnico menos pensado, que solo había dirigido un grupo de chicos en Mallorca para validar su título, terminó ganando un título mayor después de 28 años. Esto fue increíble, especialmente al ganarle a Brasil en el Maracaná, ya que Brasil había organizado y ganado las cinco Copas Américas anteriores en su país. Tuve tratativas con su representante, y en octubre de 2023, nos juntamos en Penguin Random House, definiendo que el libro se haría, abarcando de octubre de 2023 a noviembre de 2024.

¿Cuánto tiempo te tomó verlo para empezar las entrevistas clave? 

Había tenido una charla mínima con él en el año 2000, cuando como jugador ganó la liga con el Deportivo La Coruña. Pero para el libro, pasaron trece meses hasta que pude verlo. Yo caminaba por las paredes por la ansiedad y la incertidumbre. Había comenzado a hacer el archivo, viendo todas las notas y entrevistando a excompañeros y exentrenadores, pero no podía verlo a él. Esto se debió, entre otras cosas, a que él anunció que tenía dudas sobre seguir como técnico de la selección, y también por los tiempos, ya que vive en Mallorca. La primera vez que vi a Scaloni en persona y hablé con él fue en noviembre de 2024, en el predio de AFA, y realmente respiré aliviado. En enero de este año pude viajar a Mallorca, donde él está tranquilo y es uno más, y allí hice el grueso de las entrevistas. Al regreso, fui a Pujato, su pueblo, a 30 km de Rosario, donde entrevisté a sus padres y hermanos, completando la historia. También entrevisté uno por uno a los seis integrantes del cuerpo técnico, quienes no dan notas habitualmente, y tuve el privilegio de que formaran parte de este libro de 100 historias.

Desde la designación de César Menotti en 1974, ¿considerás que Lionel Scaloni fue el técnico más desconocido al momento de llegar a la selección? No sólo porque no había dirigido previamente, sino porque tampoco era un jugador tan reconocido en Argentina. ¿Esa falta de conocimiento al gran público hizo más difícil tu trabajo al tener que reconstruir su historia? 

Sí, yo creo que sí. Si repasamos los nombres, los técnicos que llegaron a la selección ya eran figuras destacadas, como Menotti, Bilardo, Bielsa, Basile, o incluso Sabella. Scaloni hizo gran parte de su carrera en España, pasando ocho años en La Coruña. Debutó en Newell's, jugó 12 partidos, se fue, fue un año a Estudiantes y de ahí lo vendieron al Deportivo de La Coruña. Como periodista deportivo yo conocía su trayectoria, pero es cierto que el gran público no la tenía muy clara. Es muy raro que el técnico menos pensado, que no había dirigido nada, haya generado tantas preguntas. Muchos amigos futboleros me preguntaban: \"¿De qué jugaba Scaloni? ¿Dónde jugó?\".

¿Hay algún dato de su carrera como jugador que le haya resultado particularmente llamativo o poco conocido? 

Jugó ocho partidos con la selección, incluyendo el Mundial 2006. Ganó siete y empató uno. Metió un gol en 2004 contra la selección de Cataluña, que paradójicamente no figura en los registros oficiales porque la FIFA no la reconoce como una selección. También hay una señal temprana: el día que debuta Messi en la selección mayor contra Hungría, que dura 80 segundos en la cancha, el primer pase se lo da Scaloni. Cuando se lo pregunté, me dijo: "Yo ya sabía que iba a ser un fenómeno, por eso se la di". Casualmente, el primer pase que Messi le da a un compañero es a Scaloni. Además, cuando expulsan insólitamente a Messi en ese partido, el primero que llega a protestarle al árbitro fue Scaloni.

¿Podrías explicar la increíble historia de cómo Scaloni llega al cuerpo técnico de Jorge Sampaoli para el Mundial de Rusia? 

Es una historia increíble que involucra a sus familias. Sampaoli es de Casilda y los Scaloni son de Pujato, pueblos cercanos a Rosario. El padre de Lionel, Ángel Scaloni, más conocido como "Chiche", tenía camiones e iba al Banco de Santa Fe de Casilda. El empleado que lo atendía en el banco era Jorge Sampaoli, quien era un jugador amateur y tenía que trabajar. Sampaoli le resolvía problemas a Chiche Scaloni y se hicieron amigos. Chiche Scaloni, que siempre quiso que sus hijos fueran futbolistas, en un momento le consigue a Sampaoli trabajo en Argentino de Rosario. Después Sampaoli triunfa y en 2016, a mitad de año, lo llama el Sevilla. En ese momento, Chiche llama a Sampaoli para que se lleve a su hijo, como una forma de devolverle el favor por haberle conseguido trabajo en Argentino de Rosario. Le insistió en que se llevara a Lionel porque conocía bien la Liga de España. Scaloni terminó sumándose al cuerpo técnico en octubre de 2016.

Tras el fracaso de Rusia y la salida de Sampaoli, ¿cómo se decidió el interinato de Scaloni? ¿Cómo surge su nombre? 

"Chiqui" Tapia vio algo importante en Scaloni durante el Mundial de Rusia. Después de la derrota con Croacia, el esquema cambió y los jugadores le plantearon a Sampaoli que no querían volver a jugar como antes. En ese momento, Scaloni estaba manejando muy bien la relación con los jugadores, congeniando con ellos y teniendo llegada. Tapia, quien está entrevistado en el libro, me contó que ahí vio el potencial. Cuando termina el Mundial y echan a Sampaoli, Scaloni le dice a Tapia que quiere quedarse en los juveniles de la AFA. Tapia, sabiendo que era el técnico de la Sub-20, le preguntó si se animaba a hacerse cargo de la Sub-20 e ir al Torneo de la Alcudia. Scaloni aceptó, pero le dijo que no tenía cuerpo técnico, por lo que llamaron a Aimar.

Mencionaste que Scaloni es obsesivo, una característica que recuerda a Bilardo. ¿Cómo definirías su estilo como entrenador? 

Para mí, es una mezcla de Bilardo y Menotti. Tiene la obsesión por el trabajo, por vivir pensando y ser hiperactivo, como han dicho los jugadores que lo ven constantemente buscando soluciones. Pero también tiene una cosa conceptual del juego, que lo acerca a Menotti. Vimos su equipo jugar con estética, muy al ataque, con jugadas como el gol de 40 toques contra Brasil en el Monumental. Si se analizan los ciclos solo por los números, el suyo es el más importante de la historia, porque los anteriores entrenadores campeones del mundo (Menotti y Bilardo) no ganaron la Copa América. Este ciclo ganó dos Copas América, la Finalissima y logró la racha más larga sin perder en la historia, con 36 partidos. Además, jugó muy bien en la mayoría de los encuentros.

Scaloni lleva dos décadas viviendo en Europa, pero nació en Pujato. Sociológicamente, ¿mantiene las características de un habitante de la pampa gringa o está más asimilado a la vida europea? 

Es un tipo campechano, con los pies sobre la tierra, y se nota que es de pueblo y sencillo en su manejo. Cuando lo entrevisté en Mallorca, lo hice en lugares públicos, como una cafetería o la cancha donde entrenaban sus hijos, y se nota que no está impostando. Por ejemplo, el 18 de diciembre pasado, en el segundo aniversario de la conquista de Qatar, él estaba pedaleando por Alta Gracia con Lito Oviedo, comiendo sándwiches en un bar, y ni le importaba el aniversario. Se mezcla con la gente y es auténtico; no está jugando para la tribuna. Le cae perfecto vivir en Mallorca, donde es perfil bajo y no lo molestan. De hecho, entrevisté a su esposa, Elisa, quien no había hablado nunca ni volverá a hacerlo, y me contó aspectos espectaculares de Scaloni en casa.

A Scaloni no le tembló el pulso para hacer un recambio generacional. ¿Su personalidad es de firmeza total al tomar decisiones, o es un líder que consulta y habla con las figuras del plantel? 

Son las dos cosas. Desde el interinato en 2018, hizo un gran recambio, haciendo debutar a más de 40 jugadores. Sabía que hacía falta una renovación. Se la jugó por jugadores poco conocidos, como el "Cuti" Romero o "Dibu" Martínez, que no atajaba regularmente en Inglaterra. Su personalidad se marcó cuando sacó a Lautaro y Paredes después del primer partido del Mundial, a pesar de que él los había puesto desde el comienzo, para meter a Enzo Fernández y Julián Álvarez. En cuanto a su liderazgo, habla mucho con los jugadores. Lo primero que hizo al ser nombrado interino fue una videollamada con Messi, con Pablo Aimar a su lado. Le dijo a Messi que, si bien no lo llamaría en ese momento, el objetivo era crear un equipo para que él solo pensara en jugar y la pasara bien. Messi valoró mucho ese gesto. Scaloni es sensible al abordar problemas: cuando Di María se expresó públicamente al no ser convocado, Scaloni lo llamó por videollamada, y terminaron llorando juntos, ya que es un tipo que va de frente. Scaloni le generó a Messi un ámbito de complicidad que no le había generado ningún otro entrenador. Además, Scaloni, que es del 78, es el técnico más cercano en edad a Messi, que es del 87, y fueron compañeros. Messi también está entrevistado en el libro, es uno de los más de 40 entrevistados.

Scaloni comenzó su carrera de entrenador por lo más alto, dirigiendo la selección, sin haber dirigido nunca un club. ¿Crees que dirigirá un club importante en Europa una vez que deje la selección? ¿Le interesa seguir su carrera por ese camino? 

Él es técnico y le apasiona esto. Desde que estaba en Pujato, ya miraba a los jugadores y siempre se ponía en el lugar de entrenador. En algún momento dejará la selección y algo va a tener que dirigir, así que seguramente dirigirá un equipo. La situación actual le resulta ideal porque, teniendo hijos relativamente chicos (de 14 y 10 años), vive en Mallorca y puede llevarlos a jugar al fútbol y entrenarlos en casa. Cuando entrevisté a sus hijos, les pregunté qué era lo mejor y lo peor de su padre. El mayor dijo que lo peor es que a veces, si juega un partido, le exige trabar más fuerte y entregarse más. Scaloni rápidamente intervino para decir que también les recuerda que disfruten y que no quiere verlos mal.

Para cerrar, te pido que nos recomiendes un libro. 

De chico no me gustaba leer, pero a los 20 o 22 años descubrí el placer por la lectura con los cuentos completos de Mario Benedetti. Actualmente me encanta Eduardo Sacheri. Como le decía a mis alumnos, escribir bien no es escribir difícil, sino lograr que el mensaje llegue y usar las palabras justas. Recomiendo el cuento "Esperándolo a Tito", del primer libro de cuentos de Sacheri, y sus novelas. La que más me gustó fue "La noche de la Usina", que fue adaptada al cine.

Entrevista de Sergio Suppo.