Cotreco

Recolección

Municipalidad de Córdoba cubrirá millonaria deuda de Cotreco

15/12/2018 | 07:29 |

El municipio asumió el pago de $ 137 millones correspondientes salarios y de aportes al Surrbac. El concejal Esteban Dómina dijo a Cadena 3 que es "un disparate" trasladar el costo a los vecinos. 

La Municipalidad de Córdoba asumió una deuda millonaria de la empresa recolectora de residuos Cotreco y lo informó a través de un decreto que llevó la firma del intendente Ramón Mestre y el secretario de Servicios Públicos, Pablo Farías.

Se trata de una suma de 137,7 millones de pesos que debía afrontar Cotreco, actual socia minoritaria de Urba Córdoba.

El municipio autoriza, a través del decreto 3998, un "subsidio reintegrable" a Crese para que responda al pago de obligaciones laborales, legales y convencionales de los empleados que habían sido cedidos a Cotreco en 2012.

Fuertes criticas

El concejal de Unión Por Córdoba Esteban Dómina indicó a Cadena 3 que es "un disparate" que ese costo "se traslade a los vecinos" y que se lo presenta como un aporte reintegrable, pero que Cotreco "está en una situación de insolvencia".

"Es el broche de oro de una sucesión de torpezas, incapacidades y errores en todo lo que tiene que ver con la basura de la gestión de Mestre. Es trasladarle a los vecinos un costo que corresponde a la empresa prestataria que prácticamente quedó afuera. Este clavo, $137 millones, quedan a cargo de los contribuyentes. Es realmente un disparate", criticó.

Dómina argumentó que le "buscaron la vuelta" a un aporte reintegrable que "no es realista" y que no hay "ninguna garantía" porque la empresa cesó prácticamente el servicio antes del 1 de diciembre -cuando empezó la nueva recolección-. Criticó que Cotreco fue "desastrosa" y que no pudo cumplir las prestaciones ni las obligaciones a su cargo, por lo que la medida es "una burla".   

El concejal aseguró que la empresa no debió ser admitida en la nueva licitación por los incumplimientos, los cheques rechazados -más de mil- y las deudas fiscales. Apuntó que se lo dejó correr con  un "dibujo" a una adjudicación a otra empresa, Urba Córdoba.

Y cerró: "Es un encadenamiento de errores, torpezas e impericias. Los platos rotos los termina pagando el vecino".