"Estamos saliendo adelante"

En diálogo con El Campo Hoy, Martín Filippi describió con amargura las peripecias por la que deben atravesar algunas industrias argentinas para poder producir. 

"Acá estamos, después de un mes de un paro bastante molesto que nos puso en una posición de un estado crítico de situación, a pesar de las advertencias de las consecuencias que esto tendría". 

Para nosotros era necesario difundir la necesidad de refundar todo esto, porque ya los daños eran mortales, pero hemos logrado que parte del personal vuelva a trabajar, y otros que no.

En este sentido, resaltó la medida dispuesta por el Ministerio de Trabajo, quien "acertadamente para resguardar las fuentes laborales dio una dispensa para que el que quiera trabajar pueda hacerlo. Esa dispensa no agradó al gremio, pese a que hay muchas voluntades de personas que quieren sacar esto adelante".

Por eso, criticó la actitud del gremio, que "empezó a difundir que la empresa iba a pedir la quiebra. Esas herramientas destructivas son modos de operación históricos que afectan claramente a la integridad de la compañía".

Recomposición gradual 

Filippi reconoce que la reactivación es lenta, pero avanza.

Hoy estamos trabajando normal en ambas plantas; y con los acreedores para recomponer los pasivos generados por esta medida de fuerza brutal. Y para poner todo para salir adelante como personas de bien que somos.

Por otro lado, criticó que el viernes Atilra llamó a una olla popular "y en el medio amedrentó como herramienta o excusa a los empleados, porque su único objetivo es dividir a la gente, mantenerlos cautivos de la información, inyecta odio violencia y veneno sobre ellos".

"Tenemos una planta en Villa del Rosario y otra en Ferreyra, ambas con capacidad de 200 a 250 mil litros cada una. En este momento estamos con una producción reducida, para tratar de recomponer todo esto, pero a más trabas que le ponen, es más difícil".

Según denunció, el argumento de ellos que tienen "es una forma de operar manteniendo a las personas esclavizadas de la información, poniendo en contra el empleado y empleador, porque como terceros ese es su único beneficio. Pero nosotros somos quienes mantenemos vivo el sindicato, empleados y empleadores".

Por eso, expresó que "cuando se den cuanta que no resuelven los problemas, todo esto se va a terminar. Necesitan hacerlo porque sino no serían necesarios". 

Filippi detalló que hoy más de la mitad de la nómina está trabajando, y con los costos a partir de las paritarias, un empleado está ganando unos 1.500 dólares. 

Es una pena que no hayan podido ver el panorama a mediano y largo plazo, pero cuando tenés a alguien haciendo daño, es sencillo, es alguien que te dice que tu pareja no sirve y nada más, para hacernos pelear entre nosotros.

Finalmente, reconoció que tienen muchas gestiones iniciadas con personas que tienen la intención de ayudarlos en este momento, "pero los tiempos se reducen porque Atilra es una traba, pone trabas en el camino, mensajes constantes a los empleados , presencia en la puerta de la planta, y todo eso requiere un esfuerzo superior a la media. Pero tenemos iniciadas gestiones y una recuperación propia que sin ayuda será más lenta y con ayuda será más rápida. Líneas financieras, apoyo de empresas y algún privado con algún interés".