Retención de vientres: las dos caras del proceso que se viene

La reducción del stock ganadero en Argentina se ha vuelto evidente debido a las políticas inadecuadas y las restricciones impuestas a lo largo de los últimos años, lo que ha llevado a muchos productores a abandonar el negocio. Según reveló Daniel Urcía, presidente de la Federación de la Industria Frigorífica de la República Argentina (FIFRA) y representante del IPCVA, “cuando vos te querés recuperar vas a generar más escasez, porque si mañana hubiera una decisión de apostar fuerte a la ganadería, se necesita retener vacas para que sean futuras madres”. 

En diálogo con El Campo Hoy, señaló que este ciclo de retención, que podría tardar de 4 a 5 años, se ha visto afectado por la incertidumbre política y económica.

También destacó que la escasez de hacienda ha llevado a un aumento de precios que ha superado la inflación. “La hacienda recuperó más precio que la inflación durante todo el año, la duplicó y un poquito por encima”, afirmó. Además, se espera un incremento adicional en los precios de la carne que podría rondar entre el 5% y el 6% en el corto plazo.

En cuanto a la situación actual de los precios, mencionó una discrepancia notable: “Yo veía una publicidad anoche de un canal de Córdoba de costilla a 8 mil pesos. Esa costilla tendría que estar valiendo 18 o 20”. A pesar de esta diferencia, reconoció que el consumidor aún tiene opciones en el mercado.

Nuevo marco legal

Respecto a las modificaciones en las leyes laborales que afectan a la industria frigorífica, se coincidió en la necesidad de una reforma. “La experiencia de un par de décadas sin que el empleo formal, el empleo privado en Argentina crezca claramente, es porque tenemos un problema”, indicó. Por eso destacó la importancia de abordar no solo reformas laborales, sino también la concientización del sistema judicial que afecta a las pequeñas y medianas empresas.

También hizo hincapié en la necesidad de una reforma previsional, señalando que “el sistema está quebrado, claramente”. En este sentido, planteó que las reformas deben considerar las particularidades de la industria, como el trabajo insalubre en frigoríficos, donde los trabajadores suelen jubilarse a los 55 años.

Finalmente, subrayó la importancia de escuchar todas las voces y propuestas para consensuar cambios que han sido postergados. “Estamos en un momento bisagra, y es importante que se escuchen todas las voces”, concluyó, resaltando la necesidad de cambiar las reglas del juego para fomentar el crecimiento del empleo privado en el país.

Literalmente, con la "mesa de los argentinos" y la "carne para todos" nos comimos a las fábricas de terneros. Un rodeo estacionado desde hace décadas presagia continuidad en la firmeza de los precios, agravada por la creciente demanda internacional. Habrá que ir haciéndose a la idea que, ahora también para los argentinos, la carne vacuna ya no es un commodity.