Racing va en serio

Superliga

Racing va en serio

16/09/2018 | 22:41 |

"La Academia" ganó en la cancha de Lanús después de 11 años. Eduardo Coudet metió mano en el equipo y los resultados se vieron enseguida. El equipo se mostró recuperado del mazazo de la Libertadores.

Diego Borinsky

La piña de River fue muy fuerte. Y Racing la sintió de un modo brutal. A nadie le gusta perder, pero todos en el fútbol saben que hay maneras y maneras de perder. Racing tiene en sus vitrinas apenas una Copa Libertadores, así que no es que cada vez que la disputa (en 2018 lo hizo por novena vez en 58 años de historia) tiene la obligación de ganarla, pero después de haber jugado muy bien en la primera ronda y de haber encontrado el funcionamiento en este semestre con un par de éxitos en la Superliga, no era ninguna quimera pensar en eliminar a River y clasificar a cuartos de final.

Bien, ya se sabe cómo terminó la historia. Racing fue vapuleado por River y se despidió de la Copa sin ni siquiera intentar una reacción, sin mostrar carácter, a falta de juego. Por eso la piña dolió el doble. Y por eso fue tan importante su reacción inmediata, ante el puntero de la Superliga Rosario Central, que llegaba con 3 triunfos en 3 presentaciones, apenas 4 días después de la humillación en el Monumental.

Coudet metió mano en el equipo, lo que se le pide a un entrenador en momentos de crisis, y los resultados se vieron enseguida: jugó muy bien ante Central, lo bajó de la cima y pasó a ocupar su lugar. “La punta no la tenemos que largarla más”, declaró tras el 2-0 al "Canalla" Lisandro López, ídolo académico y figura del partido. No largar más la punta. Si existe una meta difícil de cumplir en el fútbol argentino (salvo para un plantel tan sobrado en nombres de jerarquía como Boca) es justamente eso: conservar la posición de máximo privilegio. Se podrá jugar entre bien, mediocre y mal en nuestro querido campeonato, pero la competitividad está asegurada: cualquiera le hace fuerza a cualquiera.

Tras el parte por la doble fecha FIFA, Atlético Tucumán goleó 3-0 a Tigre en el inicio de la quinta jornada y se trepó a lo más alto de la tabla. Y al día siguiente el que hizo sus deberes fue Boca, superando a Argentinos Juniors y alcanzando a la Academia. Este domingo le tocaba a Racing demostrar hasta qué punto esa frase de "Licha" López era apenas una expresión de deseos después de una actuación aislada o un postulado cimentado en el convencimiento que el plantel lucharía por llevarlo a la realidad a cualquier precio. Racing debía confirmar su resurrección y dar un golpe de autoridad en la mesa del campeonato. Que sus rivales comprendieran que esta vez va en serio. Y en un estadio en el que no ganaba desde 2007: once años en los que había perdido 5 veces y empatado 2.

Lanús vive un proceso de transformación profunda después de haber disputado la final de la Copa Libertadores hace 10 meses. Debió liquidar ese equipo y ese cuerpo técnico tan caro y apostar a los chicos. El regreso de Luis Zubeldía era un buen incentivo para cortar una racha de 11 partidos sin poder ganar por el torneo doméstico. Pero "La Academia" no le tuvo piedad: jugó mejor que su rival, tuvo la pelota, metió un gol, se perdió la posibilidad de liquidarlo con tres llegadas claras y terminó agrupadito en su área, sufriendo justamente por esa falta de pericia en la definición.

Racing ganó 1-0 con gol de Cristaldo ante la euforia de sus hinchas que coparon la tribuna visitante de La Fortaleza. Lo hizo con justicia, yendo a forzar su propio destino. Y le mandó un mensaje al resto de sus competidores: está recuperado del mazazo de la Copa, ya superó ese bajón posterior a las caídas dolorosas, y va en serio. Tiene buenos futbolistas (el chileno Marcelo Díaz es un relojito que maneja tácticamente al equipo, gran acierto), tiene recambio y un entrenador con ideas muy claras que va al frente y trata de ganar apostando a sus ideas, pero si tiene que meter a un defensor central (Donatti) por un delantero (Licha) porque el rival le puso dos nueves, a ese entrenador no se le cae ningún anillo. Pragmatismo puro.

En tres fechas, Racing recibirá a un Boca metido de lleno en la Copa Libertadores. Será un examen más para el equipo de Coudet que deberá aprobar en su camino hacia un título que a Racing se le da muy de vez en cuando. El hincha académico, curtido en el arte del sufrimiento y la perseverancia, lo sabe más que ninguno. Falta mucho, pero esta vez da toda la sensación de que Racing va en serio.