La megaoferta que podría cambiar el futuro de Mauro Icardi

En medio de la incertidumbre sobre su futuro, Mauro Icardi volvió a ser noticia por una oferta que podría modificar el rumbo de su carrera. Según informó el portal Tuttomercato, el club saudí NEOM SC le ofreció un contrato de 10 millones de euros anuales (unos 11,7 millones de dólares) al delantero argentino, quien actualmente milita en el Galatasaray Estambul.

El vínculo propuesto tendría una duración de dos años y podría concretarse en el mercado de pases de enero. La propuesta, definida por la prensa turca como una “megaoferta”, llega en un momento clave, ya que Icardi todavía no recibió una propuesta formal de renovación por parte del club turco.

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Desde su llegada en 2022, procedente del Paris Saint-Germain, el atacante de 32 años se convirtió en una de las grandes figuras del Galatasaray y en uno de los goleadores más importantes de la liga turca. Sin embargo, su contrato vence al final de esta temporada, y las negociaciones por su continuidad aún no avanzan.

De acuerdo con el diario Hurriyet, Icardi percibe actualmente 11,5 millones de dólares por temporada, aunque habría mostrado disposición a renovar por 7 millones anuales, renunciando a bonificaciones adicionales. Esa postura se dio antes de la irrupción del millonario ofrecimiento saudí, proveniente del club de NEOM, la ciudad futurista que Arabia Saudita construye en el desierto con una inversión de 500.000 millones de dólares.

El presidente del Galatasaray, Dursun Özbek, consideró “prematuro” hablar de una renovación y aclaró que la decisión dependerá del informe que el cuerpo técnico presente sobre el rendimiento del jugador.

Mientras tanto, el interés por Icardi también cruza el Atlántico. Según medios turcos, Club América de México, Peñarol de Uruguay y Estudiantes de La Plata realizaron consultas para conocer las condiciones de un eventual traspaso. Este último club, presidido por Juan Sebastián Verón, habría mostrado el interés más concreto, buscando tentar al rosarino con un regreso a la Argentina, donde viven sus hijos tras su separación de Wanda Nara.

Entre la lealtad al Galatasaray, la tentación económica saudí y la posibilidad de volver al país, el futuro de Icardi parece más abierto que nunca.