En un escenario de cinco pisos, más de mil artistas abrieron la velada (Foto: Federico Croce).

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El imponente show que mostró "Con el vino en la piel"

06/03/2017 | 10:26 | Con un espectáculo con más de mil bailarines y sesenta músicos, el acto central de la Fiesta Nacional de la Vendimia fue un verdadero show artístico. Entrá y mirá las imágenes.

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Un colorido show en el acto central de la Vendimia (Por Luis Yunes y Laura Carbonari)

El espectáculo principal de la velada de la Vendimia 2017, "Con el vino en la piel", estuvo repleto de baile, música en vivo, trajes coloridos, representaciones y homenajes.

La puesta en escena comenzó con un cuadro dedicado al bicentenario del Cruce de los Andes del General San Martín, llamado Obertura Samaritana. Con un escorpión y una serpiente gigantes representando los riesgos del recorrido, se emuló el trayecto y se recitó el mensaje del militar al pueblo mendocino.

Con cientos de bailarines, el segundo episodio se basó en diversos países latinoamericanos y tuvo fuerte presencia de mujeres en la fuente ubicada frente al escenario, donde el agua de color malbec se movía al ritmo de bailarinas vestidas de colores.

Con 60 músicos, casi la totalidad de las melodías fueron interpretadas en vivo, con la banda sonora ubicada en una cúpula elevada sobre las gradas.

El tercer cuadro, titulado “El legado de la palabra”, fue un homenaje a los poetas mendocinos Armando Tejada Gómez y Abelardo Vázquez, quien introdujo la trama argumental en el festival.

Al son de “Hay un niño en la casa”, en una versión rapeada y con la voz de los ex Trovadores de Cuyo, se recreó de la leyenda de “El Futre”, parte de “Las mil y una noche argentinas”.

En el cuarto capítulo, un artista recreó las obras del pintor Fernando Fader. Mientras que en el quinto apareció la primera de las modificaciones. Se eliminó la presencia de un dispositivo aéreo, con bailarines volando por el aire, luego de la caída de la grúa que postergó el acto central.

La sexta escena estuvo dedicada a “Las Parras inmigrantes”, y mostró la llegada al puerto de Buenos Aires de los inmigrantes europeos, en una dramatización vinculada al hombre y su vínculo con la viña.

Luego, el director de la presentación, Héctor Moreno, bailó, como nunca había sucedido, con la Reina de la versión 2016.

A partir de allí, inició sobre el escenario la cosecha. “Manantial de fe”, el octavo cuadro, fue una representación de los males, el granizo y las insectos que acechan a la cosecha. En ese momento, apareció sobre el escenario la Virgen de la Carrodilla, patrona de los viñedos.

Las presentaciones siguientes homenajearon a músicos y escultores mendocinos.

Para el cierre, bailarines vestidos de color piel lanzaron al cielo polvos de colores, conjugados con un juego de luces que dieron fin al espectáculo, colmado de aplausos del público.

Informe de Laura Carbonari, Luis Omar Castro, Facundo Dimaria y Luis Yunes.