Clase media: una sensación más que una realidad

Ser de clase media, una sensación más que una realidad. Según un informe del Banco Mundial durante la pandemia por lo menos 2 millones de argentinos dejaron de pertenecer a la clase media. Como referencia,en 1970 la pobreza en Argentina era del 10 por ciento y cerca de un 80 por ciento de la población pertenecía a la clase media. Si tomamos en cuenta que la pobreza ha escalado al 40,6 por ciento de la población en buena medida se explica esto que decimos.

De acuerdo a los datos del Indec en el sector privado se estima que tras la pandemia, sólo 20 millones de argentinos, sobre una población de 45 millones puede considerarse de clase media. Pero además, con un agravante ,decíamos que 2 millones dejaron de pertenecer a la clase media y hay una cifra muy similar que también está muy cerquita. Y esto tiene que ver con los ingresos. Por ejemplo, en la ciudad de Buenos Aires cada vez menos gente pertenece a esta clase. Lógicamente por la inflación, por la pérdida de salarios y demás desde 2015 a esta parte sólo en Buenos Aires 350 mil porteños dejaron de pertenecer a la clase media. Claro, hay que tener un ingreso por lo menos en ciudad de Buenos Aires de 99 680 pesos por mes para pertenecer a esta clase y¿ por qué creemos, o por qué decimos que es más una sensación que una realidad? Porque un estudio del Observatorio de Psicología Social de la UBA arrojó que el 85 por ciento de los consultados dice sentirse parte de la clase media. Lógicamente no lo es.¿ Cuál fue el factor que lo ha desencadenado? Fundamentalmente la pérdida de poder adquisitivo de 2016 a junio de este año. La inflación acumulada superó el 385 por ciento.

En el mismo periodo. Los ingresos aumentaron un 280 por ciento y es por eso que mucha gente tiene la sensación de pertenecer a la clase media. Pero , según los números, no pertenece.

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