Porto Alegre, con la tradición "gaúcha" a flor de piel

La capital de Río Grande do Sul es la metrópoli más importante del sur brasileño y una de las más pobladas del país. Caracterizada por una intensa vida cultural y una altísima calidad de vida, Porto Alegre propone incontables actividades y paseos en sus diversas áreas urbanas.

En la entrada de la ciudad, nos da la bienvenida la Estatua del Lazador, un monumento que representa a un gaucho vestido con prendas tradicionales y se erige como el símbolo oficial de la urbe.

El casco histórico, el moderno centro y la fresca costanera del río Guaíba ofrecen gratas sorpresas al visitante.

Edificios de arquitectura europea, conservados en perfectas condiciones y buena parte de ellos transformados en bonitos museos, memoriales y centros culturales, forman parte de la intensa agenda cultural de Porto Alegre. La ciudad es un destacado centro productor y consumidor de teatro, música, literatura, cine y artes plásticas y visuales, con eventos y atracciones durante todo el año en establecimientos culturales de calidad.

Siempre hay mucho que ver y que hacer en la capital gaucha. Entre los lugares imprescindibles están el dinámico Mercado Público Central, uno de los diez mejores del país; el conjunto arquitectónico del Centro Histórico; los paseos en barco por el Lago Guaíba, la más característica expresión geográfica y paisajística de la ciudad; los numerosos parques urbanizados; el interactivo Museo de la Ciencia y la Tecnología de la PUC, verdadero parque temático de referencia en América Latina; y el Museo de la Fundación Iberê Camargo, primer proyecto del arquitecto vanguardista portugués Álvaro Siza Vieira en Brasil, y que convirtió Porto Alegre en un centro de difusión del arte moderno y contemporáneo.

Los aficionados al arte no pueden dejar de visitar el  Museo de Arte de Rio Grande do Sul, uno de los más valiosos del país. Su arquitectura es ya una obra de arte, completada por las casi tres mil obras nacionales e internacionales que componen su acervo.

Porto Alegre no ha sido vanguardista solo en la cultura. Es también la capital brasileña más verde –en sus calles hay un árbol por habitante— lo que hace que su clima sea más agradable. Con extensos parques y bañada por el inmenso Lago Guaíba, la ciudad vive en armonía con su exclusiva naturaleza y presenta los mejores índices de calidad de vida de América Latina.

Algunos de los parques más visitados son Moinhos de Vento, el Parque Marinha do Brasil y el Parque Farroupilha. Éste último es el preferido de los locales y alberga importantes ejemplares de la flora y fauna regional.

Otro de los espacios verdes más emblemáticos es el Jardín Botánico de la ciudad. Cuenta con más de 30 hectáreas y nos invita a recorridos cautivantes para descubrir las diversas especies de la flora autóctona.

En la noche y en la gastronomía, se revela con claridad la heterogeneidad de la cultura de Porto Alegre. La vida nocturna es intensa y está repleta de opciones que dan respuesta a todos los gustos, del más sofisticado al más informal. La ciudad es famosa por sus ricas carnes, por lo que comer un delicioso corte de picanha o acudir a una churrasquería es algo que el visitante no puede dejar de hacer. Un detalle curioso es la pasión que los "gaúchos" tienen con el "chimarrão", el mate que consumen los brasileños del sur.

La ciudad respira fútbol en cada rincón y ha visto nacer a grandes figuras como Ronaldinho Gaúcho, Emerson, Taffarel y Alexandre Pato. Sus dos estadios más representativos, los de Gremio e Internacional están separados por escasas veinte cuadras: el Arena do Gremio, con capacidad para más de 55.662 aficionados y el Beira-Río, para más de 50.000.

Dinámica pero también apegada a las tradiciones gaúchas, Porto Alegre deslumbra y ofrece actividades para todos los gustos. Sus parques y espacios culturales resaltan su atractivo e invitan a recorrerla en cualquier época del año.