El ciclo Scaloni en la Selección: ¿arranca o no arranca?

Lionel Scaloni pasó, sin escalas, de ser el quinto ayudante de Jorge Sampaoli en el Sevilla a convertirse en técnico de Argentina en la Copa América. En el medio hubo una larga historia que a esta altura importa poco porque Scaloni está a las puertas de un partido que puede significar un antes y un después.

Cuando Sampaoli dejó de ser el técnico de la Selección, nadie podía ni siquiera imaginar que Scaloni sería el sucesor. Pero pasó. Algunos cuestionaron la actitud de Scaloni, que pidió quedarse trabajando en las juveniles de la AFA, pero a Claudio Tapia no le pareció mala idea designarlo para reemplazar a Beccacece en la Sub 20 que debía jugar en L’Alcudia.

Scaloni, acompañado por Aimar, tuvo su primera experiencia seria como técnico dirigiendo a los pibes que fueron campeones en el torneo valenciano. A la vuelta, Tapia pensó que lo mejor para Argentina sería tener a Scaloni como técnico interino por diversos motivos, pero fundamentalmente porque había un par de amistosos firmados y nadie quería agarrar.

El 7 de septiembre de 2018, aquel hombre que había llegado para colaborar con Sampaoli analizando rivales, asomaba su cuerpo vestido con la remerita que había pertenecido a su mentor. Argentina golearíapor 3 a 0 a Guatemala con Lionel Scaloni como técnico interino. Dos meses más tarde, sería oficializado hasta la Copa América.

El ciclo de Scaloni en la Selección lleva apenas 11 partidos, solo dos de ellos fueron oficiales, el técnico puso 11 formaciones distintas, convocó a 59 jugadores, de los cuales utilizó a 52 y 40 fueron titulares al menos una vez. En total, el nobel entrenador, hizo 66 cambios entre partido y partido. Cualquier similitud con su antecesor no parece ser mera coincidencia.

Muchos olfatean demasiado olor a Rusia en el arranque de la Copa América de Brasil. Matemáticamente la situación no es muy distinta: el equipo llega obligado a ganar y escuchar la radio para clasificar a la próxima instancia. Pero además las continuas modificaciones de Scaloni y su flojalectura de los partidos llevan a pensar que nada cambió desde hace un año.

¿Cuál es el estilo que quiere Scaloni para su equipo? ¿Cuáles son los volantes que le gustan? ¿Y los delanteros? ¿Cuál es la idea de juego? Son preguntas que increíblemente todavía no tienen respuestas. O sí: la improvisación de la inexperiencia porque, con el mayor de los respetos, Scaloni es como un elefante arriba de un árbol: nadie sabe cómo llegó hasta ahí.

Si miramos hacia atrás veremos que Lionel Scaloni, en los pocos partidos amistosos importantes que dirigió, eligió siempre al mismo nueve: Mauro Icardi, que fue titular contra Colombia, Brasil y México. Pero la floja temporada del rosarino en el Inter y, posiblemente, sus declaraciones después de aquella noche mendocina lo dejaron afuera de la lista.

Como un detalle anecdótico, casi que no tiene sentido recordar cuál fue el primer tridente de ataque que alineó Scaloni: Pity Martínez, Gio Simeone y Pavón. Fue hace menos de un año, pero parece que hubiera pasado un siglo.

Otro capítulo olvidado de esta alocada serie llevó por título: Paulo Dybala, la eterna promesa. Incluso el futbolista de la Juventus tuvo algún que otro chisporroteo que fue aclarado por Scaloni en vivo y en directo, adentro de la cancha, adelante de las cámaras, y para el mundo. Digno de un sketch de Capussoto.

La última polémica, la más reciente al menos, se desató cuando Scaloni decidió sacarlo a Lautaro Martínez en el partido frente a Paraguay, pero la historia venía tejiéndose desde el momento en que el entrenador mandó al banco a Sergio Agüero.

El Kun Agüero ha sido uno de los grandes dilemas del ciclo. Recién fue convocado para el último amistoso previo a la Copa y en este proceso apenas jugó 168 minutos en los que casi no tuvo oportunidades para convertir.

Lautaro Martínez es el goleador de la actual etapa (con 4 tantos), pero quedó en el ojo del huracán después del partido ante los paraguayos porque dijo que estaba para seguir cuando el técnico lo sacó, en el mejor momento del equipo, por una supuesta molestia física.

Las grandes discordias parecen estar entre los delanteros porque la otra discusión que se generó fue por Matías Suárez. En el primer partido, el cordobés entró para jugar el último cuarto de hora y ese cambio despertó críticas hacia Scaloni porque lo puso a de nueve en reemplazo de Agüero.

La compleja lógica de Scalonipuede resumirse con una cadena de decisiones: Agüero pasó de no ser convocado a convertirse en el nueve del debut, después lo mandó al banco y lo reemplazó con Martínez, que no había sido considerado antes como cambio porque prefirió a Suárez, que en el segundo partido volvió a entrar, pero ya no de nueve sino por afuera…

En total, Scaloni convocó a diez delanteros desde que dirige a la Argentina. En orden, según la cantidad de partidos jugados: Dybala y Lautaro (7), Suárez y Simeone (5), Messi e Icardi (4), Correa y Agüero (3), Pavón (2) y Benedetto (1).

La lista y las oportunidades que tuvieron cada uno son la mejor descripción del trabajo de Lionel Scaloni en la Selección: ensayo y error, tratando de dar en la tecla correcta para que el motor arranque de una buena vez.