Tres victorias consecutivas suma Da Costa en el regreso

Antonio Felix da Costa fue protagonista de otra actuación dominante para quedarse con su tercera victoria consecutiva en la séptima fecha del FIA Formula E Championship que retoma su actividad con el E-Prix de Berlín.

El piloto de DS Techeetah amplió su ventaja en el campeonato a 68 puntos tras lograr mantener la diferencia con Sebastien Buemi (Nissan e.dams) durante todo carrera, mientras Lucas di Grassi (Audi Sport ABT Schaeffler) subió al último escalón del podio.

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Da Costa largó muy bien otra vez y bloqueó inmediatamente a Buemi en la primera curva. Nyck de Vries (Mercedes-Benz EQ) sacó al automóvil de la línea y frenó tarde en la primera curva. Así, Alex Lynn (Mahindra Racing) lo pasó por afuera en una nube de humo y quedó tercero.

Max Guenther (BMW i Andretti Motorsport) fue el piloto que avanzó más posiciones al principio de la carrera, ya que escaló tres lugares para quedar en octava posición en la vuelta dos.

Pero no tuvimos la oportunidad de seguir viendo al picante alemán porque su iFE.20 se pinchó en la vuelta nueve. El equipo retiró el automóvil más tarde y así terminó el desafío del campeonato para Guenther.

Los dos líderes de la carrera se escaparon en el frente y dejaron a De Vries dos segundos atrás mientras el piloto de Mercedes-Benz luchaba con Lynn, quien seguía de cerca al M6Electro de Mahindra.

Cuando habían pasado quince minutos de la carrera, ninguno de los principales cinco pilotos del campeonato, a excepción del líder de las puntuaciones, Da Costa, estaban en posiciones de puntos. Música para los oídos del piloto de DS.

En una lucha para quedar en sexto lugar, la cual duró toda la carrera, Oliver Rowland (Nissan e.dams), Sam Bird (Envision Virgin Racing), Lynn y Edo Mortara (ROKiT Venturi Racing) accionaron el MODO ATAQUE, pero el hombre de Mahindra falló y perdió terreno, ya que todos los pilotos a su alrededor se beneficiaron de los 35 kW de energía adicional.

Lucas di Grassi (Audi Sport ABT Schaeffler) superó a De Vries para quedar en cuarto lugar en la vuelta 11 y los dos pasaron por la zona de activación para defenderse del grupo que venía atrás. El brasileño hizo valer la decisión, ya que le robó el tercer puesto a Frijns porque el holandés llegó a la fiesta del MODO ATAQUE una vuelta más tarde.

La tercera bandera amarilla en toda la pista flameó debido a que el automóvil Silver Arrow 01 de De Vries, tras dos advertencias previas de dejar partes sueltas en el circuito, tuvo que retirarse de la acción. Una verdadera pena para el joven de 25 años que parecía estar recargado.

Cuando se reinició la carrera, Da Costa logró una ventaja de dos segundos sobre Buemi (Nissan) que iba atrás, lo suficiente para activar el MODO ATAQUE y mantener el liderazgo cuando todavía restaban 20 minutos. La victoria parecía un hecho.

Vandoorne, al igual que en la ronda 6, hacía su trabajo con tranquilidad avanzando por el pelotón desde el puesto 13. En la vuelta 22, el belga ejecutó una hazaña audaz para pasar a Rowland y Bird por afuera de la dupla, y quedó en la quinta posición, con Frijns en la mira como próximo objetivo.

Mientras tanto, Frijns peleaba duro con Di Grassi para quedarse con el último escalón del podio, pero el brasileño usó toda su experiencia para evitar que Frijns lo pasara. Los dos estuvieron muy parejos, ya que tienen el mismo tren de potencia de Audi.

Los dos pilotos se pasaron uno a otro varias veces tras activar el MODO ATAQUE por segunda vez. La disputa duró hasta el final, pero Frijns quedó atrás y siguió de cerca al Audi en las cinco vueltas finales.

Vandoorne se unió al grupo cuando quedaban dos vueltas y también lo hizo Bird para completar el grupo de cuatro automóviles que luchaban por el último escalón del podio. La experiencia y astucia de Di Grassi lo ayudaron a mantener el tercer lugar mientras Frijns, Vandoorne, Bird y Rowland lo perseguían.

Todos escuchamos las frustraciones de Vergne al quejarse con el ingeniero de que estaba perdiendo los neumáticos traseros cuando solo faltaban diez minutos y una vuelta para la final.

Al igual que en la primera carrera en el circuito con diseño invertido en Tempelhof, Berlín, el ritmo del francés cayó al final de la carrera y el piloto terminó en el puesto 10, detrás de Mortara (octavo) y Andre Lotterer (noveno).

El campeón reinante todavía tiene que descubrir cómo sacar partido de su DS Techeetah, como ya lo hizo hasta ahora su compañero de equipo en Berlín.

Da Costa logró mantener atrás a Buemi para quedarse con la victoria y, con un dominante desempeño, amplió su ventaja en el campeonato a 68 puntos sobre Di Grassi y Vandoorne. La ventaja de DS Techeetah en la tabla de equipos es ahora de 65 puntos sobre BMW i Andretti Motorsport.

«Estuvo muy difícil», dijo Da Costa. «Seb (Buemi) me siguió toda la carrera. Sí, fuimos un poco más rápidos, pero no hubo un momento en que pudiera dejar de mirar los espejos.

»Al activar el MODO ATAQUE, perdí terreno, pero él fue justo y me dejó algo de espacio. Tuvimos algunos problemas de temperatura con la batería, pero el equipo me ayudó con la información correcta y lo superamos.

»Estos días y este impulso me resultan extraños. Sé que se viene lo más difícil, pero estoy feliz ahora.

»Me concentro en cada día. Nos quedan cuatro carreras que se sucederán rápido. Los pilotos se acercarán cada vez más y me parece que va a estar cada vez más difícil».

Para la segunda carrera doble de la final de temporada más intensa en la historia del automovilismo (las rondas 8 y 9), el circuito de Tempelhof tendrá el diseño tradicional. Las carreras se disputarán el sábado 8 y el domingo 9 de agosto.

Cadena 3 Motor, sobre un reporte de prensa de FIA Fórmula E.