¿Por qué les gana Hamilton? Lo cuenta, aquí

Lewis Hamilton es frecuentemente consultado por lo que hace competitivamente durante un Grand Prix o por las tareas que realiza -fuera de ellos- en apoyo de la igualdad racial y el ecologismo, que harán que la Corona de Inglaterra le entregue el título de 'Sir' -Caballero-, a través de la Reina Isabel II, este fin de año.

No es muy común que el campeón del mundo nos hable de lo que hace con su equipo fuera de las carreras para mejorarse y mejorar su auto, como lo ha hecho esta semana en la nota publicada por el portal alemán 'Auto Motor und Sport', con conceptos tan importantes que nos ha parecido indispensable compartirlos aquí. Porque son profundos y ponen mucha claridad sobre la naturaleza del trabajo de un piloto y, en especial, del mejor -hoy por hoy- de todos ellos.

"Es más fácil empeorar", es el título de la nota, a partir de esta sentencia, todo lo que Lewis declara es realmente imperdible. Sobre su trabajo boxes adentro, Hamilton cuenta cómo el Mercedes se convirtió en un coche que también es bueno en curvas lentas.

Aquí va:

¿Cómo puede mejorar alguien que es casi perfecto?

Hamilton: No recuerdo todos los años que manejé en la Fórmula 1. Pero 2020 se siente como la temporada en la que estuve en promedio al más alto nivel. Por un lado, es un progreso natural, aunque no siempre se puede hacer bien. La diferencia con los anteriores es que los efectos de la pandemia de coronavirus nos dieron más tiempo para pensar en nuestros errores. Conduje carreras fuertes el año pasado, pero no fuí tan bueno en la clasificación. Por eso entré en esta temporada con el objetivo de trabajar en mis debilidades sin renunciar a mis fortalezas. Logré mejorar en la clasificación, pero también mejoré en carrera. Eso fue una sorpresa para mí.

¿Qué cambiaste?

Hamilton: Tenemos los mismos neumáticos que en 2019. He aprendido a usarlos mejor. Ahora también entiendo mejor el aspecto técnico del coche, la configuración del vehículo. Hay tantas configuraciones en estos autos que es fácil olvidarse de algo. Y luego no probaste todos los ajustes diferenciales posibles antes de la clasificación, por ejemplo. Siempre te estás quedando sin tiempo. Al final, te encuentras obligado a tomar una decisión rápida. Nos hemos vuelto más eficientes, lo que también se debe a la comunicación con el equipo que me asiste.

¿Hay algo que todavía deba mejorarse en 2021?

Hamilton: Cada vez es más difícil. Y siempre es más fácil empeorar cuando dejas pasar ciertas cosas. En cierto momento, cada deportista llega al punto en el que solo puede ajustar las tuercas en los detalles. Yo no me quedo quieto. Sé qué hacer para ponerme mental y físicamente en la mejor posición posible. Entonces es cuestión de reconocer las cosas que pueden ir incluso mejor.

Eres el maestro en la gestión de neumáticos. ¿Vino de forma natural o hubo una iluminación?

Hamilton: Soy consciente de la importancia de la gestión de neumáticos desde que estaba en GP2. Nada cambió fundamentalmente en mi estilo de conducción. El cuidado de los neumáticos no se trata solo de su estilo de conducción. También depende de lo que haga el equipo contigo. Cuando estuve en McLaren, presioné al equipo, les di mis ideas sobre la presión y la temperatura de los neumáticos, pero nunca me escucharon. Quería cambiar eso en Mercedes.

Al principio fue una lucha intentar hacer cosas diferentes. Puedes desarrollar el automóvil, hacer una buena puesta a punto del vehículo, pero la mayor incidencia en los tiempos de vuelta son los neumáticos y cómo aprovecharlos al máximo en una vuelta y en la carrera. Hay cosas como la configuración o el equilibrio aerodinámico que influyen en eso. Presiono sobre cómo quiero el equilibrio aerodinámico. Desde 2014 lo hemos cambiado paso a paso en la dirección deseada. Los ingenieros tienen sus simulaciones que determinan cómo debería ser el mejor equilibrio del vehículo. Pero estas simulaciones nunca podrán hacer lo que puedo hacer como piloto.

Siento que el auto está de mi lado. También aprendí mucho a través del proceso de decirle al equipo lo que quiero y también de pensar de manera creativa. Es un toma y daca. Y cuando obtienes el buen resultado, tienes el argumento correcto de tu lado. Entonces puedes decir: Mira, probemos algo, aunque suene loco. Eso nos hizo mejores como equipo.

¿La colaboración con los ingenieros en un automóvil hace grandes pilotos?

Hamilton: Como piloto joven, no se entiende cómo Michael Schumacher pudo lograr un paquete tan exitoso a rodar con Ferrari en ese momento, o cómo yo lo he hecho ahora con Mercedes. La mitad cree que tengo la suerte de estar en un buen coche. Hoy, aprecio lo que hizo Michael en ese entonces. Tienes que estar al mando para dirigir a este grupo de personas inteligentes, decididas y creativas en una dirección de desarrollo para que en algún momento el coche y el conductor armonicen perfectamente.

¿Existe un proceso estándar para mejorarte continuamente?

Hamilton: Me reúno con mi equipo en promedio cada semana para discutir la situación. A petición mía, este grupo se amplió. También siempre sé en qué dirección vamos con el próximo coche. En el pasado, a menudo sucedía que los aerodinámicos me decían en el túnel de viento qué problemas querían resolver y cuáles eran sus próximos pasos en el automóvil. De vez en cuando tenía que decirles: este no es nuestro problema. Esta conversación directa fue cada vez más importante para mí. No quería escuchar de segunda mano lo que planeaban los ingenieros aerodinámicos. Allí se pierde demasiado.

Al final del año les digo a mis muchachos que merecen disfrutar del éxito, pero que tenemos que hablar de los puntos críticos del coche de antemano. Luego también hablamos de cómo podemos mejorar nuestra comunicación. Si deberíamos reunirnos con más o menos frecuencia. O revisamos nuestra lista de verificación y les digo: Este punto no es tan importante, deberían ponerlo más arriba en la lista. Aprovechemos mejor los cinco minutos que ganamos.

¿Qué se ha mejorado en el automóvil de 2019 en respuesta a sus críticas?

Hamilton: Los ingenieros a menudo piensan que saben todo mejor. Es posible que a algunos ni siquiera les guste tanto escuchar al piloto. O así fue con McLaren. Es diferente con Mercedes. No voy a los ingenieros y les digo: hagan esto, hagan aquello; les digo, oye, algo anda mal aquí, podemos hacer algo mejor. Luego lo piensan y vuelven y preguntan: ¿qué tal si lo hacemos de esta manera? Así que trabajamos nuestro camino hacia adelante paso a paso.

Un ejemplo: tenemos el coche más largo de la categoría. Lo curioso es que ninguno de los otros equipos nos copió y ganamos la mayoría de las carreras. Están tan atrapados en su concepto que no quieren romper con él. La longitud nos proporciona una carga aerodinámica excepcional, pero también hace que el coche sea menos ágil. El año pasado nuestro coche estuvo bien en las curvas rápidas y medias rápidas, pero no en las lentas. Una tendencia similar todavía era evidente en las pruebas de invierno. Nos presionamos para configurar el automóvil de manera diferente para abordar este problema. Y ha mejorado sin manifestarse demasiado. Ya no tenemos el problema de hacer doblar rápido el coche.

¿Muerde mejor el eje delantero?

Hamilton: Siempre he querido coches que respondan bien en el eje delantero. Pero hay límites con estos neumáticos. Si lo haces así, los neumáticos se calentarán demasiado. Por lo tanto, solo puede reaccionar mecánicamente en un extremo del automóvil hasta cierto punto sin degradar el otro extremo. Es como un columpio. El año pasado nuestro coche era muy fuerte en la parte trasera. Así que tuvimos mucho más subviraje. Este año hemos retrocedido un poco más con el balance aerodinámico, que nos dio más libertad mecánicamente en la parte delantera. El automóvil ahora se comporta mejor en curvas lentas con un ángulo de dirección y un comportamiento de rodadura más fuertes.

Cadena 3 Motor, sobre la nota "LEWIS HAMILTON IM INTERVIEW 'Es ist einfacher, sich zu verschlechtern'", de la revista Auto Motor Und Sport -23.11.2020-