Más complicaciones para las 500 Millas de Indianápolis

Mientras las autoridades de la serie Indycar trabajan pensando en retomar en mayo su programa de competencias -incluidas las 500 Millas de Indianápolis el domingo 24- las pautas de la realidad sobre el avance de la pandemia en EE.UU. comienzan a contrariar sus intenciones.

El gobernador de Indiana, Eric Holcomb, emitió una orden de "Quedarse en casa" para todo el estado a partir del miércoles 25 de marzo hasta el 7 de abril. Eso efectivamente impedirá que los equipos de la serie IndyCar trabajen en sus talleres por una semana adicional mientras continúa la pandemia de COVID-19 ser dirigido.

“Las próximas dos semanas son críticas si queremos frenar la propagación de COVID-19, y debemos frenar la propagación. Debe ser parte de la solución, no del problema”, dijo el gobernador Holcomb durante un discurso en vivo el lunes por la tarde televisado en todo el estado.

Holcomb ha ordenado que todos los residentes de Indiana permanezcan en sus hogares, excepto cuando trabajen para negocios esenciales o para "actividades permitidas, como cuidar a otros, obtener los suministros necesarios y para la salud y la seguridad".

"Los negocios y servicios esenciales incluyen, entre otros, supermercados, farmacias, estaciones de servicio, estaciones de policía, estaciones de bomberos, hospitales, consultorios médicos, centros de atención médica, recolección de basura, transporte público y líneas directas de servicios públicos como SNAP y HIP 2.0 ", Según la orden ejecutiva del gobernador.

Esta decisión es importante para los equipos y proveedores de la serie IndyCar, ya que actualmente no entran en la categoría de "negocio esencial". La mayoría de los equipos en la serie NTT IndyCar se basan en el área de Indianápolis y se verán afectados por este orden. El equipo Penske está en Mooresville, Carolina del Norte, y Dale Coyne Racing está en Plainfield, Illinois.

Los equipos en IndyCar ya se habían cerrado después de regresar de la carrera callejera cancelada de San Petersburgo la semana pasada. Varios, incluido Chip Ganassi Racing, A.J. Foyt Racing y Dale Coyne Racing habían anunciado que reabrirían el 30 de marzo antes del anuncio del gobernador Holcomb.

Las órdenes ejecutivas del gobernador de Indiana significan que esas operaciones permanecerán cerradas durante al menos otra semana. Los equipos le han dicho a NBCSports.com que parte del trabajo de ingeniería y simulación se realiza mientras el personal trabaja desde casa.

IndyCar y el Indianapolis Motor Speedway -desde el año pasado son propiedad del magnate Roger Penske- están avanzando con la intención de correr la 104° Indianápolis 500, el 24 de mayo, siempre que la pandemia COVID-19 esté bajo control para entonces.

Cadena 3 Motor, fuente nbcsports.com