Recuerdo
27/10/2019 | 09:50 | Fue distinto, quedó en el bronce integrando la galería de pilotos sagrados de los fanáticos del automovilismo de argentina.
En un país donde la huella de los deportes mecánicos la trazaron Juan Manuel Fangio y los hermanos Gálvez, donde el país se dividía entre hinchas de Ford y Chevrolet, apareció un simpático jovencito haciendo de las suyas en el Turismo Carretera.
Luis Rubén Di Palma nació un 27 de Octubre de 1944 en Arrecifes, y con solo 19 años y siete meses de vida se convertía en ganador sobre un Chevrolet, el más joven por entonces en hacerlo en el afamado TC que surcaba las rutas del país.
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Ya por 1967 pasa a correr con la marca que se lo identificará por siempre, con un Torino, auto con el que gana sus primeros campeonatos argentinos, los de 1970 y 1971.
En esos años gloriosos del automovilismo nacional, el “Loco Luis”, el “Loco Di Palma” como lo llamaban sus fanáticos, pasó a manejar los espectaculares autos construidos por Oreste Berta, haciendo con el afamado “Mago de Alta Gracia” una conjunción perfecta para ganar cuanta carrera y título disputara también en Sport Prototipos.
Di Palma también tuvo su proyección internacional, integró la famosa “Misión Argentina” de los Torino a Nurburgring junto a los mas granados colegas de la época, y elegido también por Oreste Berta para los proyectos en el Campeonato del Mundo de Sport Prototipos con el “Berta LR” y el proyecto del “F1” también salido de la “Fortaleza de Alta Gracia.
Sus logros y hazañas, tal de un piloto extraordinario, dotado de un talento pocas veces visto lo llevó a ganar innumerables títulos en la Mecánica Argentina Fórmula 1, en el TC2000 y el Supercart.
Cosechó en su vida en las distintas categorías nacionales 9 Campeonato Argentinos, pero además, también cosechó la idolatría de los fanáticos de todas las marcas, Di Palma fue algo sacro para todo aquel que detrás de un alambrado al costado de la ruta o en un autódromo, disfrutaba de su manejo, siempre con autos espectaculares.
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Di Palma se dio el gusto de ganar con las cuatro históricas marcas del Turismo Carretera, único, y también se convirtió en el ganador del TC mas longevo, con 53 años y 238 días en Buenos Aires de 1998.
Luis, el padre de Jose Luis, Patricio, Marcos y Andrea, cuatro hijos que también disfrutaron de la pasión de un padre, que fue inigualable para los de su generación.
Se fue un 30 de Septiembre de 2000 al caer el helicóptero que piloteaba en las cercanías de Carlos Tejedor, regresando de La Pampa, tras observar un rato como clasificaba su hijo Marcos.
El “Loco Luis” vivirá siempre en el recuerdo de los fanáticos de los fierros, de todo tipo que va a ver una carrera. En los autódromos del país aún hoy siempre se colgará una bandera en su recuerdo con la leyenda “Luis Di Palma, resistente al olvido”.
Cadena3Motor-Marcelo Ingaramo
Fotos: Alejandro de Brito - jadb1@hotmail.com - @jadb1