La Chevy roja de 'Plavinil' que mantenía viva la esperanza en tiempos de 'Fores'
Carlos había publicado su libro 'El automovilismo que yo viví'
El auto que más lo identificó -pintura de José Luis Zaccarías-
Una 'Chevy Serie II' para luchar contra los Ford oficiales

Dolor en Argentina

Falleció a los 77 años Carlos Orestes Marincovich

07/06/2021 | 17:10 | Dejó de existir esta mañana en el Sanatorio Divina Providencia de la Ciudad de Buenos Aires. El arrecifeño formó parte del grupo de pilotos que le dió a su ciudad la leyenda de 'Cuna de Campeones'.

El ex-piloto arrecifeño, referente de la 'Década de Oro' del automovilismo argentino, estaba internado en el Sanatorio Divina Providencia de la Ciudad de Buenos Aires tras complicaciones derivadas del COVID-19.

Fue internado, primero, el 1 de abril en la Clínica Olivos, durante casi un mes. Luego se le trasladó a la Clínica de Rehabilitación Integral ALCLA de Nuñez donde fue intubado.

La semana pasada, se conoció por audio de su hijo Martín que Marincovich se encontraba en el Divina Providencia afectado por un shock séptico y una bacteria. Se habían solicitado dadores de sangre de cualquier grupo o factor porque necesitaba una transfusión que recibió durante la semana. Pero fue en la mañana de hoy cuando, lamentablemente, se produjo el deceso de este grande del automovilismo a los 77 años. La familia ha decidido no velarlo, en atención a las restricciones sanitarias actuales.

La aparición de Marincovich en las carreras es coetánea a las de otras grandes figuras surgidas de la ciudad de Arrecifes (Pcia. de Bs. As.), como las de Carlos Alberto Pairetti, Rubén Luis Di Palma y Néstor Jesús García Veiga. Todos referenciados en la epopeya del gran José Froilán González, estrella del automovilismo internacional en la década de los '50.

Le decían 'Sandokan' porque un tío suyo corrió TC con ese pseudónimo, aunque el ambiente lo reconocía más como 'Carlitos' o 'El Ruso'. Ganó con el Chevitú en 'el Autódromo' suplantando a Jorge Cupeiro en 1966 y, de allí en adelante, siempre estuvo metido en la pelea grande. El 'Chevitrés' se hizo para él en el '68. 

Ese año, fue seleccionado con Carlos Reutemann para la Temporada Internacional de F2. Luego, corrió en SP con un Formisano. En 1970, formó con Luis Di Palma la pareja de pilotos que condujo el Berta LR-Cosworth en la Temporada Internacional de SP y en los 1000 Kilómetros de Nürburgring.

En la actividad nacional, además del Turismo Carretera donde brillaba con su Chevy roja y ganó 10 carreras, cuando no se paraba, manejó autos de gran vanguardia como los que el Ing. Pedro Campo diseñó para SP y M.A.F1.

Si a su ciudad le llaman hoy 'Cuna de Campeones', Carlos Oreste Marincovich tiene su cuota parte del mérito y muchos seguidores del automovilismo viajaban kilómetros en las madrugadas de los domingos con la ilusión de verlo ganar. Abandonó la actividad en 1975, a pesar de un fugaz retorno al final de los años '80.

El año pasado, había aparecido el libro de sus ricas memorias: 'El automovilismo que yo viví',  La 'Solo TC' lo recuerda hoy con una de sus frases que pinta su espíritu, para dejarlo vivo para siempre en nuestro recuerdo: "El ímpetu nuestro de pretender manejar lo mejor posible ante condiciones adversas nos hacía olvidar del peligro. Para mí el automovilismo fue sumamente asombroso por la adrenalina que generaba. Jamás viví algo igual, y si volviera a nacer elegiría nuevamente ser piloto".

Cadena 3 Motor, fuentes y fotografías: Solo TC, Carburando, ACTC y Wikipedia