"Maxi" Luján, DT del femenino de Belgrano: "Las chicas tienen hambre de gloria"

Estamos al tanto de toda la movida que se generó. Nos sorprendió la movida de las entradas. Las chicas no caen. Es tarea nuestra, desde la conducción, tratar de abstraerlas del entorno y que se dediquen a jugar

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El año pasado en esa final (ante Claypole, por el ascenso a la B) ellas sintieron el entorno: 10 mil personas, el Kempes y la tele. Iban ganando 3-0, se lo dieron vuelta 4-3 y terminaron ganando 5-4

Fue una semana normal; entrenamos al máximo. Nos juntaremos a las 5, merendaremos, apagaremos los celulares y nos enfocaremos en jugar

Creo que hay una base importante de jugadoras que viene hace muchos años, desde Liga Cordobesa, que se reforzó el año pasado para competir en la C. Hay un gran equipo. Las chicas tienen un espíritu amateur envidiable

Creo que este sábado van a decorar esa lucha con el triunfo, el ascenso y si Dios quiere el año que viene ser profesionales y competir en la máxima categoría

Aspiro mucho desde lo colectivo a formar el grupo, los valores humanos. Me fijo mucho en eso. Recién terminamos el entrenamiento y me tocó la parte dura de elegir las 18 del banco. Es un momento triste, pero premiamos a todas las chicas que vienen de un recorrido largo

También irá como premio Lucía Araya, que tiene 15 años y nos representa en la Selección de Córdoba y la nacional y tiene un futuro hermoso

Las chicas trabajan y hacen distintas actividades. Otras estudian. Algunas van al secundario todavía

A mitad de año, un club grande de Buenos Aires vino por dos jugadoras, y las chicas, con un amor por el club grande, decidieron quedarse para lograr este objetivo

Belgrano tiene el pase de las chicas, por más que sean amateur. El año que viene firmarán un contrato profesional. Tiene que haber una negociación y un acuerdo entre dirigentes, como los varones

Ellas jugaron prácticamente gratis, más allá de alguna beca o ayuda, y entrenamos todos los días y viajamos cada 15 días. Es un esfuerzo grande

Arranqué con las chicas el lunes 21 de febrero, y el martes 22 nace mi hijo, Mateo, con cinco meses y cero esperanzas de vida, con las complicaciones de un prematuro. Fueron 150 días internado, en terapia. Durísimo

No fue un año que pude disfrutar, pero no falté a ningún entrenamiento, porque es mi terapia. Las chicas fueron mi ayuda y contención

Entrevista de "Tiempo de Juego"