Sobrepeso, una constante entre madres de zonas vulnerables
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Sobrepeso, una constante entre madres de zonas vulnerables

07/11/2018 | 13:54 |

Un estudio del Banco de Alimentos Córdoba en dos barrios de la ciudad identificó esta problemática. Sus razones y las claves para abordarla.

La obesidad y el sobrepeso no paran de crecer en Argentina y en el mundo a raíz de la mala alimentación. Los datos confirman que afectan transversalmente a personas de todas las clases sociales (y cada vez a más niños), pero se observa con mayor frecuencia en los sectores más vulnerables.

Un estudio del Banco de Alimentos Córdoba en los barrios Guiñazú y Villa Revol corrobora esta tendencia: de las 30 madres que participan del programa “Familias a la Mesa”, un 65% padece malnutrición por exceso (50% sobrepeso y 15% obesidad). Es un 7% mayor al promedio entre los mayores de 18 años de todo el país.

Solo un tercio de las beneficiarias se encuentra eutrófico (con un peso saludable para la altura).

Aunque el análisis realizado por las nutricionistas Carla Ardissono y María José Quellet no pretende ser estadísticamente significativo (para la población cordobesa o argentina), sus conclusiones van en línea con los datos de la Encuesta Nacional de Factores de Riesgo realizada en 2013, que demuestra que la prevalencia de obesidad y sobrepeso crece considerablemente en la población con bajo nivel socioeconómico.

Las razones, según las especialistas:

- El consumo diario de azúcar, sal, aceite, pan, criollos, facturas, amasados de panadería en general, jugos en sobre y pastas, los cuales son pobres en cuanto a la calidad de nutrientes que aportan a la alimentación, y consumidos en exceso pueden desencadenar malnutrición por exceso.

- El bajo consumo diario de legumbres, frutas, lácteos como yogur y quesos, importantes nutricionalmente para la población femenina. Sin embargo, se debe resaltar que un alto porcentaje de mujeres consumen a diario agua, leche y verduras.

Luego de obtener la información sobre el estado nutricional de las mujeres beneficiarias, se realizó un taller de alimentación saludable con 3 tópicos: cómo disminuir el azúcar y la sal de la alimentación, cómo aumentar el consumo de frutas y verduras y, por último, se dieron recomendaciones nutricionales específicas para cada madre.

Cómo atacar esta problemática

Además de recuperar alimentos (entre ellos frutas y verduras) y repartirlas entre los que menos tienen, el Banco de Alimentos Córdoba realiza desde hace más de dos años el programa “Familias a la Mesa”: tiene como objetivo el acompañamiento y asistencia alimentaria a familias vulnerables, que se encuentran en riesgo social y que tienen niños de temprana edad.

“Las madres beneficiarias señalan que la calidad nutricional de las comidas que elaboran en su hogar aumentó, a su vez también se destaca que el 70% de las madres ha incrementado la cantidad de comidas preparadas en su hogar. Eso tiene como consecuencia inmediata que haya más comidas compartidas en familia”, señaló Sofía Orellana, encargada del Área Social de la fundación.

“Las beneficiarias destacan que el programa ayudó a reforzar el vínculo familiar, a mejorar el diálogo en la familia y les dio la posibilidad de aprender a cocinar, como también mejorar la variedad de comidas a preparar”, agregó.

En cada taller se les entrega a las mujeres un módulo de alimentos diseñado por nutricionistas para que pueda servir de ayuda económica a las familias. Pero no todo es cocina. También se realizaron capacitaciones sobre primeros auxilios, nutrición, inocuidad y hasta armado de entrevista laboral y CV.

“En noviembre y diciembre se va a trabajar educación sexual y violencia de género”, contó Orellana.