Un funcionario provincial, en la impactante trama de las apuestas en el fútbol

El presidente, el secretario del club, el tesorero (y también kinesiólogo), el técnico, tres jugadores y hasta un funcionario de la Agencia Córdoba Deportes. En total, son 15 los imputados en una investigación por fraude en el fútbol, ligado a las apuestas, que prácticamente no tiene antecedentes en el país y que ha sembrado su epicentro en el club Atenas de Río Cuarto.

El fiscal de Cibercrimen de Córdoba, Franco Pilnik, imputó a estas 15 personas por los delitos de estafas (como autores o partícipes necesarios, según cada caso), al avanzar en una pesquisa que inició un año antes, luego de que la Lotería de Córdoba detectara un movimiento inusual y llamativo en su páginas de apuestas deportivas "Jugadón". 

Según consta en el expediente, el domingo 29 de septiembre del año pasado, la Lotería de Córdoba, que regentea las cuestionadas apuestas online, detectó en una de sus plataformas una inusual actividad en torno al partido entre Juventud Unida y Atenas, que iban a disputar un partido de ida por los playoff del Torneo Federal A.

Según denunció el ente estatal ante la Justicia de Córdoba, siete cuentas, varias de ellas que se acababan de abrir, apostaron por una victoria del conjunto local. Estadísticamente, se trataba de una mayor proporción de apuestas en comparación a otros partidos del mismo tipo, según se apuntó en la denuncia penal. Al analizar quiénes eran los apostadores, se descubrió que todos eran vecinos de Río Cuarto.

La sospecha fue concreta: personas que serían cercanas a Atenas estaban apostando por la derrota del equipo. Escrito de otra manera: ¿los jugadores de Atenas habían ido para atrás con el objetivo de beneficiar a los apostadores?

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Cuando Cadena 3 reveló el comienzo de aquella investigación, la noticia pronto escaló a nivel nacional. Si bien las apuestas han pervertido al deporte a nivel mundial, en Argentina hace tiempo que se sospecha que los malos arbitrajes y los movimientos insólitos de algunos jugadores ya no responden sólo a la mala formación. Pero nunca antes, como ahora, la Justicia avanzó tanto en intentar revelar aunque sea una parte de esta trama.

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Este lunes, la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), recibió un oficio de la fiscalía de Cibercrimen, dirigido al Consejo Federal, en el que se le indicó que se habían detectado pruebas que apuntalan la hipótesis de que al menos un partido del Federal A había sido arreglado por apuestas.

Aquel partido de Atenas en San Luis se convirtió en un verdadero bochorno. Juventud Unida ganó 3-0 luego de una deplorable actuación del equipo de Río Cuarto. 

A los 16 minutos, el defensor brasileño Uirá Márques hizo un gol en contra. 

A los 30 minutos, el mismo jugador frenó con la mano la pelota en su propia área, pero el árbitro no vio nada e hizo seguir. Un mal rechazo de otro defensor hizo que el balón le quedara servido a un delantero contrario que puso el 2-0 para el local.

Ya en el segundo tiempo, antes de los 5 minutos, otra vez Uirá Márques hizo todo mal para que la pelota terminara adentro de su propio arco. Si bien en las imágenes se observa cómo él empuja la pelota para otro gol en contra, la estadística oficial le anotó el gol a un delantero local, un joven de 17 años que debutó en la red pero ni siquiera lo gritó.

A la semana siguiente, tras un pálido 0-0 en Río Cuarto, Atenas se despidió del torneo. Y Márques de la ciudad, ya que terminó su contrato y se marchó.

Tras recibir aquella denuncia de la Lotería, el fiscal Pilnik avanzó en el secuestro de varios celulares. Los allanamientos conmovieron a la ciudad de Río Cuarto, ya que entre los domicilios apuntados figuraba el del entonces presidente de Atenas, Federico Felippa. El hombre ya tenía todo preparado para ir por la reelección a finales de ese año, pero tras el escándalo, no se presentó.

Tras algunos días de ebullición, el caso pareció caer en el olvido. Nada más alejado de la realidad. En silencio, el fiscal fue investigando cada celular secuestrado, uno por uno, hasta resolver ahora las 15 imputaciones.

El hoy expresidente, Luis Felippa, Mariano Lima, Sergio Bustos (secretario del club), Franco Panzolato (tesorero y kinesiólogo), Camila Ana Basualdo Quevedo (también kinesióloga), Fermín Felippa, Claudio Rafael Ochoa y Sergio Emanuel Bustos acaban de ser imputados por el presunto delito de estafa en carácter de coautores.

Pero la lista no acaba aquí. También fueron acusados como presuntos autores de estafa en carácter de partícipes necesarios, el técnico de Atenas en aquel partido, Juan Ismael Bazid (sólo dirigió a la Primera durante esos dos partidos), los jugadores Axel Fernando Juárez, Uros Milenkivic (oriundo de Serbia), Uirá de Oliveira Marques, y Abril Peralta, Juan Manuel Vilchez y Nicolás Gauna.

Este último nombre tuvo impacto propio en la investigación. Gauna hoy figura en el directorio de la Agencia Córdoba Deportes, a donde llegó de la mano del titular de esta cartera, el extenista Agustín Calleri, también oriundo de Río Cuarto.

De acuerdo a las fuentes consultadas, en los chats investigados se encontraron datos que indicarían que Gauna apostó en contra de Atenas a través de Abril Peralta, novia de un amigo de él. El funcionario provincial, habría obtenido datos de que los jugadores iban a perder adrede ese partido, por lo que apostó, a través de Peralta, 50 mil pesos en una jugada combinada que incluía resultados, goles en contra y otras aristas particulares. Ganó 400 mil pesos que aún no cobró porque la Lotería congeló todos los pagos de esta apuesta.

Al dinero se lo transfirió al novio de Peralta, Bustos, que también figura entre los imputados.

O sea, uno de los encargados de fomentar el deporte en la provincia terminó envuelto en una densa trama de apuestas, siempre según se investiga. 

En la causa también se libró una orden de paradero internacional en contra de los futbolistas Milenkivic y Marques, ya que luego de aquel torneo abandonaron Río Cuarto y la Justicia no tiene en claro dónde están actualmente.

La llegada en aquel momento de refuerzos extranjeros para Atenas, que juega un torneo semiamateur, siempre llamó la atención. 

A mediados de 2023, justo antes de que cerrara el libro de pases, llegaron dos refuerzos serbios al club, Uros Milenkovic (con pasado en el fútbol de su país, Austria y Bosnia) y Milos Zjaca (también había jugado en su lugar de nacimiento). Si bien se anunció que ambos acababan de rescindir con el club Argentino de Quilmes, de la B Metropolitana, también en la tercera división del fútbol argentino, en los registros oficiales ninguno de los dos registra un paso anterior por el fútbol argentino. 

Meses después arribaron el brasileño Uirá Marques (venía de jugar en Sol de Mayo de Viedma, del Federal A) y el paraguayo Hugo Paniagua.

En un torneo semiamateur, con tribunas semivacías (este año, en promedio, Atenas no vendió más de 500 entradas por partido), ¿de dónde salía el dinero para traer a Río Cuarto a jugadores extranjeros? Hasta hoy nunca se supo de manera oficial quién era el empresario detrás de estas incorporaciones.

Paniagua se lesionó y casi no jugó. Pero los dos serbios y el brasileño demostraron que no estaban para ser titulares. Sobre todo, los europeos, quienes de manera llamativa prácticamente nunca jugaron cuando Atenas lo hacía de local (incluso, ni iban al banco). En la semana, era común verlos disputar en la ciudad un torneo de paddle amateur, en el que se habían anotados como dupla.

Pero sí viajaban y hasta integraban el plantel principal en los partidos de visitante, según cuentan quienes conocen de cerca la campaña del "albo". Cuando le tocó jugar afuera, la producción de Atenas caía de manera notable.

Aquellos que hace tiempo investigan el entramado de las apuestas deportivas, advierten que la mayoría de ellas se realizan en plataformas extranjeras o ilegales, para intentar despistar las investigaciones de partidos amañados.

Hasta ahora, a nivel judicial, sólo hay sospechas gruesas, con chats y otras pruebas, de aquel partido de Atenas en San Luis. Pero toda la maniobra hace dudar a los investigación. Sospechan que están antes las apuestas en "blanco", las legalizadas por cada poder provincial. Pero que aún no lograron acceder al mundo de las apuestas ilegales que no reconoce fronteras.

No obstante, la causa se ha convertido en un caso inédito en la Justicia argentina. Nunca antes un fiscal había avanzado tanto para comunicarle a la AFA que tenía pruebas de indicarían que en un partido oficial se había arreglado el resultado. Lo que nunca antes se dijo en voz alta, hoy  asoma en un expediente.