En el país de las vacas "la maldición de la ganadería"

“La maldición de la ganadería es una manera de tratar de explicar el círculo vicioso que se genera entre la economía y políticas que terminan desincentivando la producción”. Así sintetizó para El Campo Hoy, el economista David Miazzo, de FADA, su exposición en el Primer Congreso Federal Ganadero que se lleva a cabo en Rosario, organizado por el Rosgan.

Tal “maldición” arranca “siempre con la pérdida del poder adquisitivo derivada de las crisis recurrentes argentinas que hace que caiga el poder adquisitivo de los salarios. Cuando cae el poder adquisitivo de los salarios termina cayendo el consumo y percibiendo que los productos son caros respecto de lo que ganamos”.

Miazzo agregó que en el caso de la carne una de las consecuencias es culpar a la exportación. “Eso deriva en políticas anti exportadoras, como ha sido el combo derechos de exportación más restricciones a las exportaciones más atraso cambiario. Eso genera un corte en los precios o en las expectativas y esas dos cosas traccionan cualquier cadena. Si esas dos cosas son malas se termina generando un desincentivo a la producción que podemos ver con los niveles de producción de Argentina, con stock estancados hace 6 décadas. En los 60 o 70 teníamos más de dos bovinos por habitante y hoy tenemos prácticamente uno”.

Poder adquisitivo y consumo de carne

Consultado por El Campo Hoy sobre la relación entre poder adquisitivo y consumo de carne, Miazzo fue contundente. “Muchas veces se le ha echado la culpa al precio y a otras cosas, pero nosotros mostramos recién un gráfico que vemos como evolucionan los salarios reales entre diciembre de 2017 y julio de este año, donde perdieron 22,6% del poder adquisitivo y el consumo de carne cayó un 21,7%. Hay una curva casi perfecta mes a mes, como lo va copiando. Entonces la caída del consumo de carne bovina no es consecuencia ni del precio ni de la exportación, sino de la caída del poder adquisitivo que ha generado una economía que no funciona en un contexto altamente inflacionario”.

Los números de la ganadería

FADA se especializa en presentar en forma permanente los números de cada cadena agroindustrial. En el caso de la carne bovina se generan 437.000 puestos de trabajo, lo que la constituye en la mayor generadora de empleo del sector. Mas de 3.500 millones de dólares de exportación en 2021, cifra que se superaría este año. “Es una cadena muy federal, esa actividad la reparte a lo largo y ancho del país sobre todo en lugares donde no hay muchas otras actividades que ayuden a dinamizar la economía”, especificó Miazzo.

En cuanto a los impuestos, los derechos de exportación le representaron a la provincia de Santa Fe un aporte de mas de 30 millones de dólares, a Córdoba 25 y a Buenos Aires 100. “El consumidor en cada kilo de carne que compra paga un 28% de impuestos. Es lo mismo que a la cadena le cuesta producir el ternero, que es lo más caro. Lo mismo que cobra el criador, que precisa una vaca y media y un buen tiempo es lo que terminamos pagando de impuestos. A la hora de ver los precios es importante enfocarse en la carga impositivo que tienen estos productos de primera necesidad”.