El área triguera, muy parecida a la campaña anterior

Las claves de la nueva campaña fueron analizadas con amplitud en A Todo Trigo, en Mar del Plata. Con relación a las perspectivas del área de siembra, se prevé un escenario muy similar al de la zafra anterior, con una reducción mínima de la superficie implantada con el cereal.

Esteban Copati, jefe de Estimaciones Agrícolas de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, comentó a El Campo Hoy que durante el congreso se vislumbró que “una de las variables que más está influyendo sobre la decisión de siembra de buena parte de nuestros productores es la incertidumbre que hay sobre la evolución de los mercados internacionales, de los mercados domésticos, los elevados costos de los fertilizantes y lo que puede llegar a pasar en materia de clima en los próximos meses, que va a ser definitorio y de alguna forma van a esclarecer si es posible lograr o no los escenarios que dimos a conocer”.

El especialista resaltó que se está “en una transición climática de un escenario de La Niña a un neutral frío, que eso comienza a verse reflejado con mejoras en los pronósticos de lluvia para los próximos meses. 

"Entendemos que el área de trigo podría llegar a 6,6 millones de hectáreas, lo cual refleja una caída interanual de 100.000 hectáreas, una pérdida del 1,5%. Este escenario está sujeto igual a la evolución del clima, tenemos por lo pronto dos semanas complicadas sin lluvias en el horizonte, pero hay que entender también que la mayor parte de la siembra del cereal se juega a partir de junio julio, momento en el cual estaríamos con reactivaciones de lluvias que permitirán avanzar con la incorporación de lotes y poder concretar estas proyecciones”.

Copati comentó además que se está viendo “que frente a este nuevo ciclo la inversión que hay que hacer para la siembra es significativamente superior a la campaña pasada y es ahí donde se centra el riesgo y la incertidumbre. Aún no está del todo esclarecido el escenario climático y hay mucha incertidumbre en cuanto a lo que puede pasar en el mercado doméstico, a las variables de la comercialización sobre todo”.

“Los precios nos están deslumbrando, pero los costos nos están atemorizando”, resaltó Copati