El millonario reclamo de la millonaria

Cristina Fernández de Kirchner está enredada en una gran pelea ahora con Javier Milei, porque desde la ANSES denunciaron que cobraba un plus de 6 millones de pesos porque su domicilio estaba fijado en la zona austral.

Por lo pronto, ella cobra por su jubilación y la pensión de Néstor Kirchner más o menos un total de 35 millones de pesos. Casi nada. Partamos de eso. En bruto, 35 millones de pesos.

Quitado todos los aportes, ya se quedaba, ¿saben con cuánto? En 21.

Querría que nos expliquen qué argentino cobra 21 millones de pesos aún siendo un empresario de primerísima línea, es una cifra importante a nivel mundial. Y acá es por una una jubilación.

Pero además con eso, se aseguraba 6 millones de pesos porque tenía declarado que vivía en la zona austral.

En la red de X, Cristina le sale replicando, en un tono muy destemplado, tono de enojo, así muy visceral

Un debate de gran altura, uno podría ironizar. De gran altura, sí. Como es público y notorio, a partir de 1995, por favor les ruego hagan la cuenta cuántos años, dice que comenzó a desempeñar cargos electivos nacionales desde diciembre del año 2000, y hasta cuándo dejó de ser vicepresidente. Treinta años atrás. Exactamente. Por lo tanto, argumenta, estuvo gran parte del tiempo en Capital Federal.

Lo cierto es que la señora reclama 6 millones de pesos y vive en Buenos Aires. Que en su documento de identidad diga lo que diga, por una cuestión de dignidad debería decir: como en la práctica, no vivo allá, quiero mantener mi domicilio porque es mi lugar en el mundo, todo lo que quiera.

Fíjense este detalle: dice que en su momento hubo un fallo, que en la gestión macrista le eximieron de pagar el impuesto a las ganancias y le ordenaron devolverle las sumas descontadas y dice, ¿sabes qué hice en ese momento?, pedí que se suspendiera el pago del retroactivo por la emergencia previsionada.

Qué generosa… Denme una jubilación de 20 millones de pesos y también te renuncio a todos los retroactivos.

Y además dice que renunció a la eximición del impuesto a las ganancias, “que te cuento, es un toco”, afirma.

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Sí señora, es un toco, y ¿sabes qué?, con lo que debería pagar de impuesto a las ganancias, podrían mejorarse muchísimas, pero muchísimas jubilaciones.

Porque lo que la señora cobra son más de 130 jubilaciones mínimas en este país, con jubilados que lo necesitan más que nunca.

Entonces estamos en una cuestión de dignidad. Que no nos venga a correr que porque vive, tiene el domicilio en su documento de identidad.

Fue vicepresidenta, hoy el país está en la situación en la que está, porque hubo un gobierno con Alberto Fernández, con Sergio Massa, que nos dejaron donde nos dejaron,

Además, digámoslo también, allá está su hijo Máximo, multimillonario, que debería tratar de explicar de dónde saca tanta plata sin hacer nada porque, todo el mundo sabe, tiene los nylon puestos.

Y va a las marchas contra el gobierno por la pérdida de libertades. Se ve que se olvidaron que las libertades que perdimos con el gobierno de Alberto Fernández cuando nos encerraron la pandemia.

Seamos justos en plantear las cosas.

Pero claro, cuando entran a hablar de cuestión de plata, es cuando muestran la hilacha.