3x1=4
16/07/2025 | 13:21
Redacción Cadena 3
Sergio Suppo
Audios
La distorsión electoral de Buenos Aires y el mosaico político del país
En los próximos días, la política argentina entrará en una fase de distorsión, con la provincia de Buenos Aires como epicentro. Este territorio, donde vota casi el 38% del electorado nacional, celebrará por primera vez desde 1983 una elección anticipada, desdoblada de la nacional, el 7 de septiembre. La magnitud de Buenos Aires, que concentra casi el 40% de la población, hará que su contienda electoral opaque la diversidad política del resto del país, generando una percepción sesgada de las opciones disponibles.
En Buenos Aires, el escenario se polariza entre dos grandes coaliciones. Por un lado, el kirchnerismo peronista, fracturado pero unificado para esta elección, con Axel Kicillof y Cristina Kirchner como figuras centrales, aunque su relación sea tensa. Por el otro, los libertarios de La Libertad Avanza, liderados por una hegemonía que ha absorbido al PRO y a parte del radicalismo, relegando a estos aliados a un rol subordinado. Esta competencia binaria, que recuerda la histórica tradición argentina de bipartidismo del siglo XX, ahora encarnada en coaliciones, dominará la narrativa electoral. Las listas cierran este sábado, y pronto conoceremos los nombres definitivos de los contendientes.
Fuera de esta polarización, emergen alternativas marginales. La izquierda dogmática, que coquetea ocasionalmente con el kirchnerismo pero mantiene su independencia, estará presente. También surge una tercera vía liderada por figuras como Facundo Manes (radicalismo), Florencio Randazzo y Julio Zamora (peronismo no kirchnerista), con el respaldo del exgobernador cordobés Juan Schiaretti. Sin embargo, esta opción enfrenta un desafío titánico: en un escenario dominado por las dos grandes fuerzas, es improbable que logre competitividad relevante. Sacarán votos, pero difícilmente disputarán el poder.
Fuera de Buenos Aires, el panorama es más diverso. Los libertarios, con su boleta violeta, estarán presentes en todas las provincias, a veces en alianza con fuerzas locales, como los gobernadores radicales de Chaco (Leandro Zdero) y Mendoza (Alfredo Cornejo). El kirchnerismo, en cambio, no tendrá la misma presencia homogénea de antaño. En provincias como Catamarca, Tucumán o Córdoba, el peronismo se desmarca del sello kirchnerista. Córdoba, con su histórico peronismo provincial, es un caso paradigmático. Schiaretti, cuya candidatura a diputado nacional parece cada vez más probable, podría influir en la estrategia de otras fuerzas, aunque su habitual hermetismo mantiene la incógnita.
Este mosaico provincial contrasta con la narrativa binaria de Buenos Aires. Mientras los libertarios buscan consolidar un "partido nacional" desde el Gobierno, las elecciones de octubre revelarán una suma de realidades locales, con partidos provinciales y alianzas variopintas. La cuenta final de deputados y senadores dependerá de esta diversidad, y los bloques que se formen en diciembre marcarán el rumbo político del país.
La distorsión bonaerense nos hará creer que solo existen dos opciones, pero la política de Argentina es mucho más compleja. El 7 de septiembre y el último domingo de octubre serán clave para entender no solo quién gana, sino cómo se redistribuye el poder en un país que, lejos de ser binario, es un caleidoscopio de intereses y colores políticos.
Te puede Interesar
De cara a las elecciones
La diputada nacional habló con Cadena 3 y señaló que el exgobernador de Córdoba "es una gran alternativa". Sin embargo, aclaró que hay otras figuras como Randazzo y Monzó que podrían competir.
Cuadro de situación
Buenos Aires
El tridente del PJ compuesto por Máximo Kirchner, Axel Kicillof y Sergio Massa firmó el pacto que constituye el espacio.
Elecciones legislativas
En una reunión clave, votaron por unanimidad autorizar a la Mesa Ejecutiva encabezada por Cristian Ritondo a avanzar en la construcción de un nuevo espacio con miras a los comicios del 7 de septiembre.