Decadente, ridículo y aburrido

-Tengo tres palabritas para empezar : decadente, ridículo y aburrido. Así es el espectáculo en el que se ha convertido la política argentina. Acaba de volver el presidente Alberto Fernández de su misión en Europa.

-Nos preguntamos a qué fue. ¿A avisar que tenemos productos agropecuarios en buenos precio y que tenemos la segunda reserva de gas natural del mundo? como si Macron, Scholz o Sánchez no lo supieran. ¿Fue a decir que no hay que ir tan fuerte en contra de Rusia?.¿Fue a decir que hay que tratar de para apaciguar la situación en Ucrania ?.

-No hay nadie del gobierno que lo pueda explicar. En febrero apenas horas antes de que Vladímir Putin desatara la cruel invasión a Ucrania, el presidente Fernández fue a decirle a Putin que él esperaba que la Argentina fuera la puerta de entrada de Rusia Hoy Rusia es poco menos que una mala palabra en la política internacional.

-Alberto Fernández ahora le fue explicar a Europa lo contrario. Mientras él estaba ya acá, el gobernador de la provincia de Buenos Aires, que es el segundo político más importante en funciones en la Argentina, Kicillof dispuso un generoso aumento salarial a la administración pública.

-Mientras el ministro Guzmán trata de restringir la emisión de plata., la otra mitad del gobierno, la otra mitad del oficialismo, la reparte a tontas y a locas.

- Muchachos, nos están ajustando con la inflación. Dicen que no hay ajustes, pero ajustan con la inflación. Nos hemos acostumbrado a una inflación del seis por ciento. Eso da una interanual del 60 por ciento. Si lo proyectás te puede dar cien por ciento y hay un desconcierto generalizado.