Proponen que médicos jubilados se reinserten en el sistema de salud en Salta

El sistema público de salud atraviesa un momento crítico, que va más allá de problemas logísticos: la falta de profesionales dispuestos a trabajar en el interior. Y al ser una provincia geográficamente compleja por sus distancias, avanza un proyecto que busca convocar a médicos jubilados para cubrir esta demanda.

En ese marco, el ministro de Salud salteño, Federico Mangione, abordó en La Mesa de Café esta problemática, revelando una situación que, según él, afecta a todo el país y que tiene profundas raíces económicas y generacionales.

— Ministro Mangione, ¿sumarán médicos jubilados para cubrir la atención en el sistema público. ¿Esto es así?

Estamos con un problema generacional que creo que está viviendo todo el país: la escasez de recursos humanos. Las carreras y especialidades son muy largas, de no menos de 10 a 12 años, y los chicos buscan algo más light. Cuando le proponemos a un joven ir a un punto lejano de la provincia, con horas de viaje en camioneta, no están aceptando. El planteo de la escasez es el mismo en congresos con ministros de toda Argentina, por eso decidí comenzar a hablar con los médicos jubilados.

— Los recién egresados no quieren ir a los parajes, pero los médicos jubilados están dispuestos. ¿Esto es por vocación, o porque las jubilaciones son insuficientes para sobrevivir?

Que no te quepa duda que es por eso también. Digamos la verdad, son paupérrimas las jubilaciones que tienen en general. Hay voluntad y vocación, pero es algo económico también. Muchos colegas con más de 75 años siguen trabajando en consultorios privados porque necesitan el ingreso. La gente necesita plata. Eso hay que decirlo, no hay que tener vergüenza de decirlo. No alcanza, es vergonzoso.

— Legalmente, un médico jubilado que ha renunciado a su matrícula. ¿Se pone en riesgo legal si ejerce la medicina? ¿Cómo lo va a solucionar en Salta?

Es un proyecto que estamos presentando, ya que sinceramente estoy preocupado, no tengo gente que me cubra en el interior. Estoy trabajando con la caja de jubilados para ver si nos permiten expender indicaciones con una matrícula J que ya existe.

El problema legal es económico también, porque el médico más joven no quiere que el médico más grande siga trabajando. Desgraciadamente, los jóvenes no me dan una solución y quienes me la pueden dar son los jubilados.

— ¿Cuál es el riesgo si esta tendencia de falta de profesionales y especialistas continúa en el sistema de salud?

Nadie está tomando conciencia de lo que va a pasar. Nos estamos quedando sin médicos. Hoy en terapia pediátrica tengo solamente 12 médicos formados. Y tengo 10 neurólogos infantiles para una provincia grande. Es un problema mucho mayor a lo que estoy comentando, a futuro, vamos a tener problemas muy complejos. Si los gobiernos no toman cartas en el asunto, vamos a tener un problema grave en hospitales, clínicas y en cualquier lado, porque no hay profesionales.

Por otra parte en diálogo con Cadena 3, Enrique Heredia, coordinador de Práctica Final Obligatoria de Medicina en la UNSa y él mismo jubilado matizó la cifra: "Tenemos más del 60% de graduados en Salta. Uno o dos que han vuelto a pueblos donde hicieron su práctica y hoy están nombrados".

Heredia calificó la contratación de jubilados como "una buena estrategia de salvataje" para transmitir experiencia a los jóvenes. "Lo penoso sería que acepten porque no les alcanza la jubilación", advirtió. 

Él, con 42 años de carrera, rechazaría el ofrecimiento para dedicarse a la docencia hasta los 70. Sobre ingresos, explicó que en el sector privado muchos siguen trabajando post-70 porque "el haber jubilatorio no garantiza lo mínimo". 

En el sistema público salteño, con una sola jubilación provincial, ronda el millón de pesos; la máxima llega a 2,5 millones (unos 1.500-1.700 dólares). "En octubre, una familia necesitó 1.176.000 para no ser pobre", recordó, citando datos que superan incluso las jubilaciones más altas.

Entrevista de Miguel Clariá y "Siempre Juntos" y Elisa Zamora